Son pocos los datos de novelas que hayan servido para educar sobre temáticas de actualidad. Pero las hubo. Una de ellas fue “Montecristo” (2006), donde una de las protagonistas buscaba a su hermana apropiada por la última dictadura cívico militar. Varias escenas fueron filmadas en la sede de Abuelas de Plaza de Mayo y a los pocos días de emitirse dispararon las consultas en el banco genéticos de jóvenes que tenían las edades de los hijos apropiados.
Otra fue “Vidas Robadas”, inspirada en la historia de Marita Verón, la joven que fue raptada por una red de trata y está desaparecida desde abril de 2003. Se emitió en 2008 y fue paralela al tratamiento de la ley para luchar contra el delito.
Ahora llega “100 días para enamorarse”, que trata el problema de los adolescentes trans, brindando información y creando conciencia. Tratan un tema del momento. Informan, pero también tratan el tema desde el acompañamiento y el amor del entorno a una chica que está haciendo su transición de género ya que se autopercibe varón.
Los brasileros suelen tomar los temas candentes y transformarlos en telenovela con altísimo rating. Estos tres ejemplos argentinos dan cuenta que más allá de la oportunidad de sumar televidentes se puede entretener, educar y debatir contando una historia.
Infancias trans: la ficción que es realidad para 20 familias
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