Región

Límite de Entre Ríos y Buenos Aires

Las quemas no cesan en el Delta del Paraná, y ahora deben apagar el fuego en las islas Lechiguanas

Es en jurisdicción del departamento Gualeguay. Desde el sábado último, habitantes de la ciudad bonaerense de San Pedro registran las columnas de humo por las nuevas quemas de pastizales, que obligaron a la intervención de brigadistas, bomberos, policía y fuerzas de seguridad


Un equipo de 35 brigadistas forestales nacionales y de varias jurisdicciones debieron sumarse esta semana a personal de la Policía de Entre Ríos, de Defensa Civil y de Bomberos Voluntarios de cuatro ciudades de esa provincia para combatir y controlar por tierra y aire los nuevos incendios desatados en las islas Lechiguanas, en el delta del río Paraná.

Este miércoles, el personal involucrado en la emergencia evaluaba los puntos de fuego. Hubo ayuda de la naturaleza:  las lluvias que persisten en la región colaboran para que las llamas no se propaguen y hasta se extingan.

Los incendios detectados en las Islas Lechiguanas, departamento Gualeguay, fueron “de gran magnitud”, dijeron las autoridades. Este miércoles, sin embargo, informaron que se encuentran “controlados y sin peligro de propagación”.

El nombre Lechiguanas proviene del quechua lláchiwána (avispa que produce miel​). Se trata de un archipiélago fluvial ubicado del delta en el sur de la provincia de Entre Ríos, sobre el límite con la provincia de Buenos Aires.


En el marco del Plan Provincial de Manejo del Fuego, y ante la nueva bajante de las aguas que genera material combustible en territorio de islas, la secretaria de Ambiente entrerriana, Daniela García, dispuso numerosos operativos por aire con un helicóptero de la Policía de Entre Ríos y un avión hidrante.

Personal de la Policía, de Bomberos de las localidades de Gualeguay, Urdinarrain, Villa Paranacito y Gualeguaychú, de Defensa Civil y de Prefectura acompañan las tareas por tierra.

También participa personal de Defensa Civil, del Plan de Manejo del Fuego provincial, técnicos de Protección Civil de Buenos Aires; Brigadistas Forestales de la Policía Federal, del Parque Nacional Ciervo de los Pantanos (Buenos Aires), Parque Nacional Pre Delta (Diamante) y del Ejército Argentino.

El gobierno de Entre Ríos recordó que está vigente la prohibición de realizar cualquier tipo de quemas sin autorización ya que pesa sobre la zona una medida cautelar del Juzgado Federal de Paraná que prohíbe de manera “absoluta, acciones humanas con capacidad de alterar el medio ambiente”.

Las columnas del sábado: humo hasta en San Pedro


Vecinos de la localidad bonaerense de San Pedro denunciaron el sábado último enormes humaredas frente a sus costas, en la jurisdicción entrerriana del Delta en el departamento Gualeguay. Las estimaciones indican 16 focos activos de fuego que afectaron un área de 451 hectáreas de humedales.

En las Lechiguanas, sobre el kilómetro 282 del Paraná y al norte de la laguna La Brava, se sintieron las consecuencias de las nuevas quemas de pastizales frente a San Pedro. Los pobladores de esa localidad bonaerense difundieron las imágenes a través de las redes sociales. El fuego estaba a cinco kilómetros del casco urbano y a unos dos kilómetros tierra adentro en la costa entrerriana, a lo largo de un frente ígneo de tres kilómetros.

Nada cambió

Durante 2020, los incendios en esa zona provocaron graves daños y gran cantidad de humo y cenizas que cubrieron a varias ciudades, por lo que la provincia de Entre Ríos inició causas judiciales ya que consideró que fueron generados para “obtener rebrote como forraje para el ganado, limpieza de la zona y pesca y caza”.

En ese entonces, el gobernador entrerriano, Gustavo Bordet, decretó la emergencia ambiental debido a “la degradación de los humedales y los efectos negativos en la salud”.

Se instalaron torres o faros de videovigilancia y la Nación envió aviones hidrantes, helicópteros y personal para reforzar las acciones sobre los incendios. Brigadistas de distintas fuerzas de Entre Ríos, Chubut y Neuquén sesumaron para minimizar la afectación de viviendas y animales autóctonos, pero el daño fue grande.

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