La autorización judicial que permitirá que Alex Freyre y José María Di Bello, una pareja gay, se case por civil el 1º de diciembre en
Capital Federal fue celebrada por la comunidad homosexual local, quienes a su vez siguen reclamando que se trate y apruebe en la Legislatura provincial la ley de unión estable de parejas con el objetivo de que aquellas personas unidas por el afecto tengan entidad ante el Estado y, de esa manera, poder obtener algún tipo de protección social. Este proyecto –largamente postergado por presiones varias, especialmente de la Iglesia– ya tuvo despacho favorable en la Cámara de Diputados de la provincia y ahora se encuentra en el Senado, donde aguarda su aprobación. En la Cámara alta el proyecto perdió estado parlamentario en dos ocasiones, pero todo indica que la tercera –este año– será la vencida.
El titular de la Asociación Civil Vox, Guillermo Lovagnini, no ocultó su satisfacción frente a la luz verde que se prendió en la ciudad
de Buenos Aires que permitirá el primer casamiento por civil de una pareja gay en toda Latinoamérica. “Creo que el permiso
para casarse otorgado a Alex y José María es una muy buena noticia y marca un hito muy importante. Igualmente, a lo que nosotros aspiramos es a que se apruebe la ley que permita la unión estable de parejas para todos”, recordó.
Sobre cómo está actualmente el proyecto de unión estable de parejas, el militante a favor de la diversidad sexual adelantó que recibió un llamado de la secretaria del senador (José) Baucero “para avisar que la semana que viene (por esta semana) comienza
el tratamiento en comisión”.
“Nos parece que hay como una intención de que la norma salga antes de fin de año. Igualmente, si eso no ocurre esta vez no perderá estado parlamentario por lo que confiamos que el año que viene, si ningún vaivén político produce lo contrario, tendríamos la ley sancionada”, remarcó.
Por su parte, Martín Peretti Scioli, quien concurrió sin suerte en febrero de 2008 junto a su pareja Oscar Marvich al Registro Civil
del Distrito Centro para contraer matrimonio –“porque no existe legislación que avale ese pedido”, según les explicó en aquella
oportunidad la jueza – también evaluó como “sumamente positiva” la unión que se celebrará el próximo 1º de diciembre.
“Me parece un gran avance. Nuestro tema, según hablé con la abogada hace algunos días, está en la Cámara de Apelaciónes y estaría a punto de tener una resolución. Lo que nosotros aguardamos es que la Justicia se expida favorablemente. El hecho de que (Mauricio) Macri no haya apelado la decisión de la jueza es algo sumamente favorable. Otra cosa sumamente auspiciosa es que la jueza que permitió que se saque el turno en el Registro Civil sea de primera instancia”, indicó.
Más adelante, Martín comentó que si la Cámara no tomaba una resolución favorable al pedido, concurrirán “a la Corte Suprema de Justicia de la Nación”. “Esperamos ansiosamente que los chicos puedan casarse en Buenos Aires porque eso marcaría un momento histórico y sentaría un precedente absolutamente importante para el resto de los casos. Estaríamos ante un hecho inédito, no sólo en el país sino también en toda Latinoamérica”, explicó quien pasó a la historia como integrante de la primera pareja gay que se presentó en un Registro Civil de la ciudad para contraer matrimonio entre personas del mismo sexo.
Paula Martínez es tesorera e integrante de Vox y concuerda con Peretti Scioli sobre la necesidad de un acompañamiento desde el Estado a los cambios que se están produciendo en la sociedad con respecto a los derechos de las minorías sexuales. “En Rosario
estamos esperando el dictamen de la Cámara de Apelaciones. La decisión tomada por la Justicia de Capital Federal sienta un antecedente importantísimo para la jurisprudencia a nivel local y nacional en el tema de la igualdad”, subrayó.
“Sobre la unión estable de parejas, nosotros hemos tenido en su oportunidad una entrevista con el senador (Ricardo) Spinozzi quien nos manifestó que cada senador va a votar a conciencia y no en bloque. Nos parece que es hora de que el Senado provincial tome una posición”, añadió.
La mujer apuntó al “lobby de la Iglesia” como una de las mayores trabas a la hora de sancionar la ley. “La Iglesia confunde nuestro pedido. Nosotros no estamos hablando de matrimonio, estamos hablando de unión estable de parejas y esto es tanto para parejas homosexuales como heterosexuales. Lo que queremos es que dos personas que se aman, independientemente de su sexo, puedan vivir juntas teniendo los mismos derechos que tiene el resto de la población”, aclaró.
Por último, se le preguntó a Paula si notaba una mayor apertura de la gente a la hora de aceptar a las minorías sexuales. “Hay una mayor aceptación de la diversidad sexual. Eso es notorio y es muy saludable. Igualmente hay que remarcar que una cosa es hablar desde Rosario o cualquiera de las grandes ciudades y otra es hacerlo desde algún pueblito de Salta o del interior mismo de Santa Fe”, concluyó.
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