Las distintas corrientes de la UCR provincial exploraban anoche la posibilidad de un acuerdo para evitar internas en la renovación de autoridades partidarias. Al cierre de esta edición, seguían conversando en Santa Fe dirigentes de los tres espacios predominantes: NEO, el Grupo Universidad y el MAR.
“No hay espacio para una interna”, indicó el diputado nacional Mario Barletta, presidente del Comité Provincial de la UCR. Claro que, hasta el mismo cierre de listas –hoy a las 21–, nadie puede dar por seguro el acuerdo.
Barletta tiene la idea de dejar para más adelante el debate acerca del rol de la UCR de cara a las elecciones intermedias de 2017. El PRO, del cual el partido es aliado a nivel nacional, viene pidiendo una definición concreta. Del otro lado, los líderes del Grupo NEO –Felipe Michlig, Carlos Fascendini y Maximiliano Pullaro– pretenden dejar por sentada la pertenencia del radicalismo al Frente Progresista.
Para el actual titular del partido, “no hay que definir en una elección interna si el radicalismo debe estar en un frente o en otro, eso se definirá en su oportunidad por los organismos pertinentes, en el momento previo a las elecciones”. Barletta, esgrimió respecto a los comicios de 2017: “Podemos estar en un lado, en otro, en ninguno. No es una discusión para saldar en una elección interna”.
La posición del Grupo Universidad es mantener la doble alianza: con el socialismo en la provincia y con el PRO en el plano nacional. Pero a nadie escapa que el armado de listas, el año próximo, cuando se elijan concejales y diputados nacionales, será un escollo. El propio Barletta no descarta que en 2017 la UCR compita contra el socialismo.
Como paso previo al debate electoral, el radicalismo tiene que renovar su conducción provincial. Anoche, los integrantes de NEO –senadores, diputados, ministros, intendentes y concejales de toda la provincia– realizaban un plenario en Santa Fe para tomar una postura y comunicarla a los otros espacios. El Grupo NEO quiere hacer pesar su desarrollo territorial en el armando de la nueva cúpula partidaria.
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