Con la presencia del intendente Miguel Lifschitz y del arzobispo de Rosario, José Luis Mollaghan, se recordó ayer en el Teatro La Comedia un nuevo aniversario del levantamiento del Ghetto de Varsovia, la emblemática sublevación de los judíos en Polonia cuando las tropas alemanas del régimen nazi comenzaron la segunda deportación masiva hacia los campos de concentración y exterminio, durante la Segunda Guerra Mundial.
Del homenaje, organizado por la Daia Rosario, participaron también la directora del Museo del Holocausto de Buenos Aires, Graciela Jinich, y la sobreviviente del campo de concentración de Varsovia Irene Dav, quien brindó testimonio del padecimiento que sufrieron ella y su familia bajo la ocupación nazi de Polonia. En representación del gobernador Hermes Binner concurrió el ministro de Gobierno de su gestión, Antonio Bonfatti.
El acto, con un teatro colmado por una multitud en la que se destacaba la presencia de numerosos jóvenes de la colectividad judía, comenzó con la entonación de los himnos de la Argentina e Israel.
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