Edición Impresa

La protesta no se corta

La reunión de ayer entre tamberos y representantes de la industria láctea no arrojó ningún resultado positivo, y por consiguiente continúan los bloqueos a empresas de las provincias de Santa Fe y Córdoba.


La reunión técnica de ayer en el Ministerio de Economía de la Nación entre representantes de productores tamberos y de la industria láctea no arrojó mayores definiciones ni propuestas oficiales que permitan morigerar los reclamos por el precio de la leche cruda en tranquera.

En rigor, tamberos de las provincias de Santa Fe y Córdoba continuaban bloqueando el ingreso de más de veinte usinas lácteas por una recomposición del valor del litro de leche que perciben, y que desde hace más de un año y medio está en un promedio de 1,50 peso, mientras que el precio de la leche en góndola aumentó, en algunos casos, de 4 a 7 pesos en el último año.

También hubo ayer negociaciones entre tamberos y referentes de la industria en la zona de la cuenca lechera de Santa Fe para intentar destrabar el conflicto. Mientras, los negociadores de la Mesa Nacional de Productores de Leche, Julio Aimar y Manuel Ocampo, se reunieron con dirigentes de las entidades del agro, en la sede del microcentro porteño de la Sociedad Rural Argentina.

Durante la jornada de ayer creció la versión que indicaba la posibilidad de que el gobierno decidiera subsidiar a los productores lácteos, con una compensación de 0,30 centavos por litro. Los subsidios se distribuyeron desde 2008 a los tamberos y eran de 0,20 centavos, y con interrupciones siguieron hasta diciembre de 2009, cuando se cortaron.

La reunión en el Ministerio de Economía comenzó mientras una veintena de plantas industriales lácteas estaban bloqueadas en las provincias de Santa Fe y Córdoba, mientras en la provincia de Buenos Aires unos 150 productores se apostaron en el ingreso del establecimiento de La Serenísima, de Trenque Lauquen, en la provincia de Buenos Aires.

Las plantas bloqueadas suman una capacidad de recibo de leche de entre cuatro y cinco millones de litros diarios. El problema es que los tambos no pueden guardar la leche sin entregar más de 36 horas, luego de lo cual comenzaría el derramamiento frente a las plantas. El vicepresidente segundo de Federación Agraria, Guillermo Giannasi, y el secretario gremial, Omar Príncipe, recorrieron ayer las protestas en las provincias de Santa Fe y Córdoba.

Comentarios