Miguel Passarini
“Cómo hacer buen vino de una cepa enana”, dice Serrat en un momento de su “Romance de Curro «El Palmo»”, algo que puesto a funcionar en el campo de lo teatral se revela como un verdadero desafío.
Las micropoéticas o microdramaturgias, en tiempos de la modernidad líquida, coparon en los últimos años la atención de la cartelera porteña (Teatro Bombón, Microteatro, entre más), en la mayoría de los casos con propuestas atractivas, originales y algunas de alto vuelo que buscan correr al teatro alternativo de su lugar de tradición abriendo el juego a una serie de articulaciones que juegan, particularmente, con la duración de las obras. Pero también lo hacen con la profusión de temáticas, la intimidad con el espectador apelando a cierta complicidad y con una serie de variables como los intermedios con comidas, bebidas y un lugar para el encuentro.
Más allá de algunas experiencias previas, Rosario tendrá desde este jueves su primera propuesta de este tipo con carácter de temporada que bajo el nombre Teatro Bonsái agrupará cuatro obras de quince minutos cada una que se generarán en simultáneo, se ofrecerán en el nuevo Espacio Bravo y reunirán a un puñado de talentosos artistas locales entre actores, dramaturgos y directores, partiendo de la música como temática. Las obras, todas de carácter autónomo, serán “Rock”, “Cumbia”, “Tango” y “Bolero” y se podrán ver a modo de recorrido pagando una sola entrada con un intermedio.
“Este es un proyecto que llevamos adelante de manera conjunta con Julieta Yelin y Cecilia del Valle, ambas con un vasto recorrido y formadas en la escritura, entre otros, con Mauricio Kartun”, adelantó Romina Mazzadi Arro, dramaturga y directora, una de las creadoras del grupo Hijos de Roche y una de las gestoras de Espacio Bravo, que de este modo, entre otros proyectos, pone a funcionar su nuevo multiespacio de Catamarca al 3600.
“En realidad fueron ellas las que me convocaron a participar en este proyecto pensado a partir de microdramaturgias; lo interesante es que venimos de lugares distintos porque Julieta viene de las letras, Cecilia del cine y yo del teatro. Son proyectos que funcionan muy bien con el público y creo que hay algo del clima de época que se asocia a esta idea de lo breve que proponen este tipo de montajes que son un desafío porque hay que cerrar algo dramáticamente en sólo quince minutos”, agregó Mazzadi Arro que además de dirigir uno de los montajes es la productora general.
De lo breve
Tomando a este primer proyecto como disparador de un ciclo que buscará con otras obras y artistas tener su continuidad a lo largo de todo el año e incluso en otros escenarios, en principio, la nueva propuesta del emblemático Espacio Bravo que de este modo cuenta con un lugar definitivo adquirido el año pasado, busca también amplificar el público combinando calidad artística y un formato original.
Es así como surgieron “Rock”, con dramaturgia y dirección de Mazzadi Arro y la actuación de Ricardo Arias; “Cumbia”, con dramaturgia y dirección de María Celia Ferrero y las actuaciones de Romina Tamburello, Micael Genre Bert y Rosana Moscato; “Tango”, con dramaturgia y dirección de Cecilia del Valle y las actuaciones de Eva Ricart y Juan Nemirovsky, y “Bolero”, con dramaturgia de Julieta Yelin, dirección de Vicenç Tuset y las actuaciones de Federico Giusti y Franco Perozzi.
“Siempre partiendo de la idea de la simultaneidad, queremos replicar este proyecto, con otros equipos artísticos, en otras salas pero también en espacios abiertos y centros culturales o museos; en Bravo serán dos lugares en simultáneo pero pensamos, a lo largo del año, montar otras obras en otras lugares donde la simultaneidad se multiplique con cinco, seis o diez obras, para que se puedan mostrar aún más trabajos para más público, incluso infantil, y también vamos a intentar publicar los textos de las obras”, adelantó la directora quien junto al equipo de trabajo ya prepara las nuevas convocatorias y no descarta la posibilidad de poder desarrollar algún espacio de formación en la escritura de obras breves o microdramaturgia.
Respecto de las cuatro obras que orecerá esta primera experiencia, Mazzadi Arro, que adelantó que en julio estrenará un nuevo trabajo con las talentosas Paula García Jurado y Elisabet Cunsolo (las protagonistas de la entrañable Baby Jane) y que a lo largo del año habrá varios estrenos en la sala, detalló finalmente: “Cada uno de estos montajes tiene su autonomía estética y dramática; intentamos que todo sea múltiple y nutra desde distintos aspectos a todo el proyecto. Pero está claro que aquí hay algo que tiene que ver con la esencia del proyecto: las que aparecen no son escenitas cortas para el público que no tolera ver una obra entera. Por el contrario, esta propuesta busca entender a las microdramaturgias como algo completo, pequeño como el bonsái, pero que no le falta nada, como pasa en el cine con el cortometraje”.
Para agendar
Las primeras cuatro obras del ciclo Teatro Bonsái tendrán su estreno este jueves, a partir de las 21, en Espacio Bravo, de Catamarca 3624, donde continuarán en cartel todos los jueves hasta fines de marzo
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