Policiales

Violencia en zona sur

La madrugada de Tablada sigue sumando víctimas

Un hombre, un muchacho y una adolescente fueron baleados este sábado por la madrugada en un lapso de dos horas y media. El núcleo de los ataques fue en inmediaciones de Colón y Biedma. Hay dos detenidos


Otra vez se escucharon disparos en la zona sur de Rosario. Otra vez en barrio Tablada y al amparo de la noche. Otra vez heridos que agonizan en el Heca. Una postal que se transformó en lugar común en la crónica policial. Tres personas resultaron baleadas este sábado por la madrugada en un lapso de dos horas y media. El núcleo de los ataques fue en inmediaciones de Colón y Biedma. Las fuentes oficiales no arrojaron hipótesis sobre el por qué de los ataques ni deslizaron si están vinculados a la disputa de sangre que recrudeció en las últimas semanas en ese sector de la ciudad. La Policía detuvo a cuatro sospechosos.

La zona delimitada por Alem, bulevar Seguí, avenida Belgrano y Uriburu viene siendo escenario de hechos de violencia letal que recrudecieron en las últimas semanas. En diez días, uno de los dos bandos que se disputa el liderazgo del territorio en la zona sur arremetió con una brutal contraofensiva que dejó cuatro muertos y cinco baleados. Los investigadores sospechan que detrás de estas últimas balaceras están los clanes Caminos-Segovia, referenciados en barrio Municipal y un sector de Tablada y enfrentados con los laderos de René Ungaro, referente de barrio Grandoli y quien se sospecha opera desde su celda de Piñero.  La madrugada de este sábado sumó otro hecho de sangre que dejó tres heridos –dos graves– y cuatro detenidos. Aunque no está claro si la agresión se enmarca en dicha saga de venganzas con trasfondo narco, el control del paravalanchas leproso y la construcción de identidad de jóvenes de sectores populares en un marco de violencia.

Pasadas las 2, el Comando Radioeléctrico llegó hasta inmediaciones de Colón y Biedma alertados por un llamado que daba cuenta de una balacera. En el lugar había un hombre de 40 años, Claudio M., y junto con él estaba Juliana, una adolescente de 16 años, quien había sufrido el roce de un disparo en la pierna derecha. Los efectivos la trasladaron al hospital Roque Sáenz Peña donde recibió curaciones. Claudio M. refirió de forma escueta a los policías que poco antes habían aparecido tres hombres que dispararon sobre él y la chica para luego darse a la fuga.

El Heca recibiría poco después a un joven y a un hombre, baleados de gravedad. En sendos ataques, la Policía estima que fueron perpetrados en el mismo marco de la agresión a la adolescente. A las 3.30, Ulises S., de 21 años, llegó al centro de salud trasladado en un patrullero. Había recibido tres plomos: uno en el abdomen y dos en ambas piernas, describieron las fuentes. Su estado de salud era reservado. Veinte minutos después derivado desde el Sáenz Peña llegó en un móvil del Sies Carlos M., de 36, con heridas de arma de fuego en abdomen y muslo derecho. Una versión indica que los dos muchachos quedaron en medio de una balacera de la que no eran protagonistas y se llevaron la peor parte.

En las inmediaciones de donde se produjeron los ataques, la Policía informó que detuvo a dos hermanos como sospechosos de efectuar los disparos: Matías y Lucas R., de 26 y 24 años y domiciliados por Biedma. Uno de ellos fue identificado por las señas de los heridos y porque llevaba una camiseta de Central, confió una fuente.

De inmediato y no muy lejos de allí, en pasaje Villar y Necochea los efectivos detuvieron a Leandro S. y Sabina J., de 19 y 24 años. La pareja intentó darse a la fuga en motocicleta, cuando fueron aprehendidos se les secuestró un arma de fuego.