Edición Impresa

Al Clásico, con vida

La Lepra necesitaba un triunfo para levantar

Necesitaba ganar Newell’s. Para fortalecerse anímicamente tras siete fechas sin triunfos. Para creer en sí mismo y no acostumbrarse a irse a casa sin una sonrisa.

Necesitaba ganar Newell’s. Por Diego Osella, que parecía haberse quedado sin ideas y ya se estaba alejando incluso de sus convicciones. Por los jugadores, que eran los principales cuestionados por la gente y de alguna manera hacían poco para revertir esas críticas. Y por el hincha, que iba a la cancha en estado de resignación y desencanto, pero estaba acumulando bronca y había puesto al Clásico como la fecha tope de la paciencia.

Necesitaba ganar Newell’s. Para fortalecerse anímicamente tras siete fechas sin triunfos. Para creer en sí mismo y no acostumbrarse a irse a casa sin una sonrisa. Y sobretodo, para iniciar con el ánimo en alza una semana clave, donde el final tiene marcado con fuego el cotejo ante Central.

“Este triunfo nos entrega tranquilidad para el clásico. Ahora vienen 90 minutos de furia, de dientes apretados”, comentó Osella tras la victoria, en una clara señal que el triunfo actuará como un tranquilizante en una semana donde los ánimos crispados podían ser protagonistas excluyentes y los nervios podían hacer más pesada una mochila de seis partidos sin triunfos ante el Canalla, que cada día se torna más difícil de sobrellevar.

Ganar era importante, primordial. Casi un resultado excluyente. Osella había anticipado en la previa que no importaban las formas, que en este caso la victoria era demasiado necesaria como para hacer otro tipo de análisis.

Pero conseguir los tres puntos con una actuación convincente, mostrando mejorías importantes en lo individual y colectivo, y con aciertos del entrenador como la inclusión de Mauro Formica o el ingreso de Fértoli en el complemento, no dejar de ser una gran noticia en el Parque.

“La gente merecía irse contenta”, se sinceró Osella. Es cierto, hacía mucho que se esperaba una victoria, Pero lo más importante es que el hincha vio que Newell’s está con vida. Entonces, hay esperanza.

Comentarios