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Final no feliz

La Lepra lo tenía, pero se le escapó

Ganaba con goles de Formica y Maxi, aunque retrocedió demasiado y el Ciclón lo empató; Osella dijo que el equipo se cansó.


Una vez tenía que pasar. Newell’s se encaminaba a una nueva victoria donde los merecimientos no sobraban, pero se durmió en una pelota parada y se tuvo que conformar con un empate que le permite seguir invicto y único escolta de Estudiantes. No es poco, pero la bronca fue inevitable.

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LO BUENO. Newell’s mantuvo el invicto, demuestra que nadie lo supera fácilmente y por ahora es único escolta de Estudiantes. Formica está en un gran nivel y marca la diferencia y Maxi volvió al gol ante Central y San Lorenzo, lo que es una gran noticia. 

Esta vez no hubo fortuna, ni apareció el salvador Pocrnjic, ni hubo un golpe de jerarquía de Maxi, Scocco o el Gato para cerrar el pleito. La Lepra retrocedió demasiado y San Lorenzo vio el hueco para ir por la igualdad. Y la encontró en un cabezazo solitario de Paulo Díaz ante la mirada incrédula de muchos jugadores leprosos que, muy cansados, sólo esperaban el pitazo final.

LO MALO. Advíncula da muchas ventajas en defensa y si juega Escobar de cuatro resta en ofensiva. Amoroso corre y nada más. Las lesiones duelen, ya que jugar sin nueve es imposible para la idea de Osella y ayer apenas tuvo tres refuerzos en cancha. Dolieron los centros.
LO MALO. Advíncula da muchas ventajas en defensa y si juega Escobar de cuatro resta en ofensiva. Amoroso corre y nada más. Las lesiones duelen, ya que jugar sin nueve es imposible para la idea de Osella y ayer apenas tuvo tres refuerzos en cancha. Dolieron los centros.

Jugar sin nueve es un problema para Osella. Es cierto que el DT no tiene la culpa de las lesiones de Matos y Scocco (ayer quedó claro que no está para jugar), pero tampoco rinde ubicar como centroatacante a jugadores que no sienten el puesto. Ni Amoroso, ni Maxi y mucho menos Mauricio Tevez encuentran comodidad como ‘falso nueve’ y mucho menos si la pelota viene por arriba.

Y si bien el resultado del Clásico le daba crédito al DT para ‘hacer lo que quiera’, está claro que el regreso de Advíncula y la apuesta por Tevez tuvo que ver con un intento de mostrar hacia afuera que no es un técnico mezquino. Y tal vez ese haya sido un error, ya que el lateral peruano hizo poco y nada en ataque y desestabilizó una defensa que se había mostrado más firme sin su presencia.

Lo pudo ganar Newell’s, es cierto. Porque Formica está en estado de inspiración y transformó un buen quite de Quignon en un golazo. Y si bien un descuido de Advíncula y Escobar derivó en el rápido empate de Bergessio, un rato más tarde la única acción positiva de Amoroso del torneo derivó en un centro de Tevez y una aparición goleadora de Maxi para poner a Newell’s cerca de los tres puntos. Pero como dijo Osella, el partido “se hizo largo” para la Lepra. Y sostenerlo fue un suplicio. El calor pegó fuerte, San Lorenzo metió a Cauteruccio para sumarlo a Belluschi, Cerutti y Tino Costa, y ya no era tan ‘muleto’, y los cambios de Osella no redituaron.

Entonces quedó apelar a la gracia divina. A ese ‘no se qué’ milagroso que apareció en el Clásico, con Quilmes, Tigre o Gimnasia, y permitió ganar sin tanto merecimiento. Pero esta vez no funcionó. Y el empate en el epílogo produjo algo de bronca. Aunque no dolió tanto. Es que el Clásico cicatrizó todas las heridas y todo se mira con optimismo en el Parque.

Uno por uno leproso

Pocrnjic (5). Poco que hacer en el primer gol. En el empate se quedó clavado debajo de los palos, pero luego impidió el tercero.

Advíncula (4). Muchos problemas en la marca. Si no fuera por su capacidad ofensiva, su presencia no tendría justificativo. Ayer, no lo tuvo.

Escobar (5). Rápido para los cruces. No tuvo demasiado trabajo aunque en el gol de Bergessio pagó caro la desatención de Advíncula.

Moiraghi (5,5). Muy firme en la marca. Le hizo sentir su rigor a Bergessio y no perdió nunca en el mano a mano.

Paz (5). Defensivamente impecable. Ganó mucho de arriba. Le tocó marcar a un rapidito como Cerutti y no sufrió tanto. En ataque le cuesta.

Mateo (5). Entrega su vida los 90 minutos, contagia esfuerzo, pero a veces ese ímpetu genera desorden. Lo perdió a Díaz en el gol del empate.

Quignon (6). Después de media hora se acomodó. Robó y asistió a Formica en el gol. En el complemento recuperó mucho hasta que salió cansado y su ausencia se sintió.

Amoroso (5). Corre mucho, juega poco. Mérito en el segundo gol leproso al pelear una pelota e iniciar el ataque. Sigue en deuda.

Formica (7). Cuando la pelota pasó por sus pies Newell’s fue otro equipo. Anotó un golazo y le dio rédito a cada una de sus acciones. Se fue cansado y la Lepra perdió la pelota.

Rodríguez (5,5). Definió bien en el segundo gol y casi anota otro. Se nota que no está en plenitud física, pero con la jerarquía intacta.

Tevez (5). No es nueve y la función le quedó grande. Bien en el gol de Maxi al desbordar y asistir. Después peleó con la marca y con un lugar en el campo de juego que le sacaba su mayor virtud: la velocidad.

Fertoli (4). No entró bien. Se dedicó más a marcar que a lastimar. Y generó el córner que provocó el empate del Ciclón.

Scocco. No está bien físicamente y se evidenció a pesar de estar en cancha sólo 15 minutos. Así no le sirve a él y a Newell’s. “Los médicos y el profe me dicen que está para jugar 45 minutos y por eso lo pongo”, se excusó Osella.

Elías. Pocos minutos en cancha, no se pudo acomodar con un partido que a esa altura no permitía titubeos.

Osella: “Nos quedó muy largo”

Con bronca. Así se lo vio a Diego Osella ayer en la conferencia de prensa pos partido. Y no sólo por el empate agónico del Ciclón, sino más bien por algunas preguntas sobre el funcionamiento del equipo.

“El partido nos quedó muy largo. Vi un nivel muy bueno en el primer tiempo, pero en el tramo final San Lorenzo manejó la pelota y retrocedimos demasiado. Me voy con bronca porque se nos escapan dos puntos a los 41 minutos del segundo tiempo y la semana pasada ganamos tres a los 47. Son cosas que pueden pasar”, confió.

Sobre las causas del bajón en el final, Osella explicó: “No pudimos mantener la intensidad. Las fatigas de Tevez, Formica y Quignón nos complicaron. Se nos escapa un partido pero no es nada preocupante. Es algo que puede ocurrir y es totalmente solucionable”.

En cuanto a los objetivos que se pueden ir trazando, el técnico deslizó con algo de sorna. “Nosotros estamos para jugar y para seguir ganando. Estamos invictos y ganamos 5 partidos y empatamos los otros 3. No tengo la bola de cristal, no sé qué va a pasar. Nosotros nos enfocamos en jugar y en ganar al equipo que tengamos del otro lado, sea quien sea”.

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