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maestros del engaño en santa fe

La Justicia condenó a cinco falsificadores de licencias de conducir

La investigación fue encabezada por el fiscal Omar De Pedro.


La Justicia provincial condenó a cinco hombres a tres años de prisión de cumplimiento efectivo por ser integrantes de una organización delictiva que confeccionaba y vendía licencias de conducir y libretas de sanidad falsas en las ciudades de Santo Tomé y Santa Fe.

La investigación fue encabezada por el fiscal Omar De Pedro. Los cinco condenados son Jorge Pablo Layana (33 años); Jorge Alberto Layana (63 años); Luciano Carlos Pozzo (42 años); Alberto Oscar Chatelain (45 años) y Oscar Alcides Cuevas (66 años). Por su parte, Ramiro Jesús González falleció mientras estaba detenido con prisión preventiva en el marco de la investigación.

Las penas son de cumplimiento efectivo para los cinco hombres fueron resueltas en el marco de dos juicios en los que se abreviaron los procedimientos y cuyos jueces de la Investigación Penal Preparatoria fueron Jorge Pegassano y Nicolás Falkenberg. Los cinco fueron condenados por ser autores del delito de asociación ilícita –en calidad de miembro de la organización– y falsificación de documentos públicos, ambos en concurso real.

Organización desbaratada

“La organización delictiva fabricaba los documentos públicos falsos y luego los vendía a terceras personas”, informó el fiscal De Pedro. Y agregó: “La actividad se desarrollaba en la ciudad de Santo Tomé y las ventas se concretaban en la estación de servicio Aspro ubicada en Hernandarias y Moreno; en la plaza ubicada en Buenos Aires y Obispo Gelabert y en una vivienda particular ubicado en Moreno al 3.000. También se entregaron licencias falsas en la plaza ubicada en la intersección de las calles Mendoza y 25 de Mayo de la ciudad de Santa Fe”.

De Pedro hizo hincapié en que “la importancia de esta investigación no sólo radica en el desbaratamiento de la banda. También es relevante que se haya cortado un circuito ilegal por el cual se vendían licencias de conducir truchas, es decir, se brindaba autorización para conducir vehículos en condiciones irregulares con el riesgo que implica para la comunidad”.

Con relación a las libretas de sanidad apócrifas, el fiscal relató: “Eran entregadas a González, quien las comercializaba a terceras personas. De hecho, cuando fue allanada su casa, se le secuestraron computadoras, una impresora y varias cartulinas de color verde con la inscripción «Libreta de Sanidad» y letras del logo del gobierno provincial”.

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