País

Choque de especies

La culpa es del carpincho: vecinos de Nordelta exigen traslado del roedor en forma inmediata

Así lo exigió la "comisión pro equilibrio carpinchos Nordelta" que, de todas maneras, asegura: "De ninguna manera abogamos por la erradicación total de los carpinchos de nuestro entorno". Los memes que generó el cruce cotidiano del roedor y los vecinos de ese barrio cerrado del Tigre


¿Invasores? Especialistas aseguran que los roedores procuran volver a su hábitat.

Hay alerta en Nordelta, en la localidad bonaerense de Tigre, por una invasión de carpinchos que atacan mascotas y deñan propiedades. En los últimos días se viralizaron imágenes de los roedores circulando en las calles, en los jardines y en los espacios verdes del barrio cerrado. La preocupación –según vecinos– es porque atacaron a un perro, generaron destrozos y accidentes viales.

Varios vecinos de ese coqueto barrio del Tigre compartieron imágenes de carpinchos que coparon lo alguna vez que fue su ecosistema natural. Las postales se volvieron virales en las redes sociales y generaron la creación de diversos memes. Tras la simpática imagen que pueden suponer, hay preocupación porque generaron la muerte de un perro, daños materiales y hasta generaron un accidente de tránsito. En las últimas horas se conoció un comunicado de ocho puntos que menciona la “reproducción explosiva de esta especie” y de una “situación insostenible”, para exigir al final que Flora y Fauna autorice traslados “en forma inmediata y sin dilaciones”. El escrito no refirió a qué lugar debería mudarse el roedor.

Al menos según lo expresado por un vecino de Nordelta que publicó en sus redes sociales: “Quisiera que trasladen a los carpinchos porque atacaron a mi mascota en mi propio jardín”.

Luego habló con Eduardo Feinmann en Radio Rivadavia y confirmó el deceso del perro: “Justo estaba en el jardín, cuando ingresó una familia de carpinchos, mi perro les fue a ladrar y lo mordieron en la parte de la columna. Eso le generó una parálisis y terminó falleciendo”. Acerca del tamaño de los carpinchos, el vecino reveló son “realmente inmensos: llegan a pesar entre 50 y 70 kilos”.

Otra de las consecuencias de tan peculiares visitas fueron los accidentes viales. En una ocasión, las cámaras de seguridad registraron el instante en el que un roedor cruza la calle y una moto lo termina embistiendo, aunque el piloto no sufrió heridas de gravedad.


En la zona se identificaron a 400 ejemplares, aunque se estima que su población total podría rondar los 3.500 en 2023.

Adelmar Funk, especialista, aclaró que el Hydrochoerus hydrochaeris “no apareció en Nordelta, sino que volvió”.

“En Nordelta tiene que ver con que crearon un ecosistema que favorece el regreso de estas especies. Los carpinchos suelen tener muchas crías; cuando te diste cuenta de que aumentó la población es porque ya tenés el problema encima”, explicó en La Nación el fundador del Complejo Ecológico de América.

 

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Uno de los vecinos de Nordelta que alzó la voz en torno de los roedores es Gustavo Iglesias. Junto con otros 200 vecinos, armó una comisión para poder tratar el tema con organizaciones no gubernamentales y con la Dirección de Flora y Fauna de la provincia de Buenos Aires. “Nos encantan los carpinchos, la primera vez que vimos uno nos dio mucha felicidad. En 2015 aparecieron dos en mi jardín y los quería acariciar. El tema es que después empezaron a reproducirse de manera exponencial porque, lógicamente, en Nordelta no tienen depredadores. Ahora caminan por las calles, devoran los jardines y tenemos problemas con las mascotas. Tampoco sabemos qué enfermedades pueden transmitir y si podrían, o no, atacar a un nene, porque andan en manada por todos los barrios”, señaló Iglesias.

El comunicado de los vecinos

El texto difundido a la prensa porteña lo firma la “comisión pro equilibrio carpinchos Nordelta” y asegura que escriben en “representación de centenares de vecinos de Nordelta directamente afectados por los problemas de público conocimiento quiere dejar en claro lo siguiente”, según La Nación. Luego enumeran ocho puntos en los que hacen una cronología del conflicto con los roedores más grandes del mundo:

– En Nordelta amamos a los carpinchos. Hemos convivido con ellos en armonía desde hace 10 años como en ninguna otra urbanización del AMBA. Antes del 2010 no se avistaban desde nuestros hogares. En las áreas no desarrolladas recién se avistaron unos pocos ejemplares en 2006. Es de presumir que para el año 1990 el carpincho estaba prácticamente extinto de esta zona por caza furtiva desde hacía décadas. Gracias a nosotros hoy hay carpinchos en esta zona. — Invitamos a quien guste a encontrar un carpincho vivo libre en 20 kilómetros a la redonda de Nordelta, siendo el mismo tipo de ecosistema. No lo van a encontrar porque en Nordelta no matamos carpinchos y fuera de Nordelta sí se los caza sin miramientos.

– De ninguna manera abogamos por la erradicación total de los carpinchos de nuestro entorno. Nuestro pedido concreto es, retrotraer la cantidad de carpinchos a los que había cuatro o cinco años atrás por traslado a otras reservas naturales de aquellos ejemplares a los que el ecosistema Nordelta ya no puede alimentar y sostener. De ahí en más controlar su reproducción por los métodos que los especialistas indiquen a los fines de mantener una cantidad acorde al ecosistema que los alberga con su bienestar y el de la comunidad que los rodea.

– Nótese que en Nordelta este animal no tiene depredador, y por reglamentos propios y por convicciones personales de quienes aquí vivimos no se los caza y están totalmente protegidos por nosotros mismos contra cualquier intento de caza furtiva.

– Los problemas comenzaron en 2019, donde ya se notaba un crecimiento explosivo de la cantidad de ejemplares. Algunos vecinos advirtieron esto a la Administración de Nordelta Ciudad (AVN), y esta a Flora y Fauna de la provincia de Buenos Aires. Creemos que ambas entidades no supieron o no quisieron ver el problema al que nos enfrentábamos. Un problema meramente de progresión matemática por el tipo de reproducción de esta especie.

– En 2020 empeoró la situación y Flora y Fauna y AVN nos dijeron que estaba todo bien, que ya iba a pasar. Que se iban a autorregular.

– Así llegamos a la actualidad, cuando la inexorable reproducción explosiva de esta especie entro en la parte exponencial de la curva, lo que nos puede llevar a duplicaciones y sextuplicaciones de su número en uno, dos, tres o cuatro años respectivamente de no retirar inmediatamente una importante cantidad de animales que están en condiciones de reproducirse.

– La situación es insostenible hoy, para los carpinchos porque ya no les alcanza el alimento para tanta cantidad, y se expanden hacia las afueras de Nordelta pudiendo a este paso generar problemas fuera de los límites de Nordelta mismo en muy poco tiempo. Y, como se pudo ver en videos, generando accidentes viales y otros peligros mutuos para ellos y los humanos que convivimos.

– Flora y Fauna debe autorizar estos traslados en forma inmediata y sin dilaciones.

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