La dirigente señaló que una de las situaciones más críticas se aprecia en la frontera del departamento (provincia) colombiano Norte de Santander y el estado (provincia) venezolano Táchira por las restricciones al paso de personas y mercancías.
“Los habitantes de Cúcuta (Colombia), Ureña y San Antonio (Venezuela) están separados sólo por el puente internacional y por lo tanto su actividad comercial y social se desarrolla en las tres poblaciones”, señaló Pardo.
“En total, cinco millones de personas de la frontera se afectan directamente por la crisis”, dijo la economista colombiana en declaraciones al diario El Espectador citadas por la agencia noticiosa alemana DPA.
La presidenta de la Cámara Colombo Venezolana de Comercio afirmó que el problema se agrava porque una de las características del intercambio entre ambos países se presenta por carretera y en su gran mayoría por esa zona.
Sin embargo, sostuvo que los problemas se registran desde hace un año, cuando el presidente venezolano, Hugo Chávez, ordenó “congelar” las relaciones diplomáticas y comerciales con Bogotá a raíz de un acuerdo mediante el cual militares estadounidenses pueden usar hasta siete bases colombianas.
Chávez rompió del todo las relaciones el jueves pasado después de que Bogotá denunciara ante la Organización de Estados Americanos (OEA) que guerrilleros colombianos se refugian en Venezuela.
La compra de productos colombianos por parte de Venezuela comenzó a disminuir desde 2008 como consecuencia de la crisis económica mundial y el problema de agudizó después por las tensiones diplomáticas, por lo que los exportadores colombianos llevan varios meses en busca de nuevos mercados.
“Hay un desplome vertical de las exportaciones, de 6.000 millones de dólares a 1.500 en dos años”, dijo Pardo.
Según la dirigente, los exportadores colombianos de textiles, calzado y marroquinería, confecciones, electrodomésticos y alimentos son los más afectados.
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