La histórica sede del Banco Nación, ubicada en el corazón de la ciudad cuna de la Bandera Nacional, fue cedido a la Universidad Nacional de Rosario, cuyas autoridades anunciaron hoy que allí funcionará un centro cultural.
El imponente edificio de la avenida San Martín -conocido en la ciudad como “la catedral”- tiene un alto valor patrimonial, fue construido entre 1926 y 1929 por los hermanos arquitectos Tito y José Micheletti y hoy las autoridades del Banco de la Nación Argentina lo cedieron formalmente a la Universidad.
El traspaso del edificio, encuadrado en el período arquitectónico denominado eclecticismo-academicismo, es la resultante de un acuerdo marco firmado por las autoridades de ambas instituciones.
Por ese acuerdo, la Universidad transfirió a la entidad financiera nacional el manejo ocho mil cuentas personales y de alrededor de 500 millones de pesos anuales, que eran administrados por el Banco Municipal de Rosario.
Las llaves fueron entregadas por el gerente zonal del banco, Roberto Sanguinetti, al rector de la UNR, Darío Maiorana, durante un acto en el que estuvieron Silvia Gallegos, directora de la institución nacional; el vicerrector, Eduardo Seminara, y el diputado nacional Agustín Rossi, entre otras autoridades.
“Este espacio, tan anhelado y necesario para nuestra universidad, tendrá como objetivo la proyección de todas las producciones en sus distintas disciplinas del arte y la cultura universitarias, de la región y la ciudad”, anunció el rector.
“En la Biblia se lee que nadie prende una luz para ponerla debajo de un mueble. Desafortunadamente este edificio estaba apagado y cerrado y hoy le volvemos poner luz”, enfatizó Maiorana y anunció que el Centro Cultural estrenará su primera exposición en marzo.
El edificio, una muestra de la arquitectura de principios del siglo pasado que se conserva en excelente estado, sorprende tanto en su interior como en su exterior.
El interior, revestido totalmente de granito traído especialmente de Italia en los años 20, se completa con altísimas y esbeltas columnas que le otorgan a la planta el formato característico al de una catedral.
También hay un singular escritorio circular, de una fina madera preciosa, con cajeros totalmente trabajados en bronce bruñido.
El diseño exterior deja ver una enorme puerta de bronce macizo, el delicado tallado del jaspe que enmarca la puerta, la ventana de cristal de color azulado con bisel y el bronce trabajado en sus marcos.
Gallego, que también preside la Fundación de la entidad, apuntó que es intención de las autoridades traer en el transcurso de 2011 “la muestra anual del Salón de Cultura del banco, que tras este bicentenario empezará a recorrer el país”.
“También pensamos traer una parte de nuestra pinacoteca, que por primera vez en los 119 años de la entidad ha salido del Banco este año”, anunció la funcionaria.
Al calificar al edificio como “patrimonio de la Argentina”, Gallego resaltó el acuerdo y el destino que se le dará, lo que permitirá preservarlo “como testimonio del paso del tiempo, como testimonio de la magnificencia arquitectónica de otros tiempo”.
Las llaves fueron entregadas al rector, Darío Maiorana por el gerente zonal de la entidad financiera, Roberto Sanguinetti.
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