El 20 de diciembre último, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, montó un show con presos «prestados» de la provincia de Buenos Aires para encabezar la supuesta inauguración de la cárcel federal de Coronda, aunque esa unidad penitenciaria no tenía entonces los servicios necesarios, entre otras obras pendientes, para alojar internos. Ahora, desde el Gobierno de Santa Fe estiman que las dependencias estarán operativas en marzo próximo.
«Si bien el personal penitenciario tomó posesión del lugar desde el momento en que Nación entregó la obra civil, hay un cronograma de puesta en funcionamiento a través del cual nos transmitieron que estaría plenamente operativa en marzo», arriesgó este martes el ministro de Seguridad de Santa Fe, Pablo Cococcioni.
Quedan, por ejemplo, temas de logística que cerrar. «Hay que conseguirle alojamiento a las familias que se van a radicar en Coronda. Si se mudan con los chicos, hay que conseguirles plazas en la escuela. También hay que resolver algunos temas del agua y de los residuos que generaría la propia cárcel federal«, detalló el funcionario provincial.
La puesta en marcha de la cárcel federal en la ciudad cabecera del Departamento San Jerónimo es un reclamo santafesino de larga data. Hay, en la actualidad, dijo Cococcioni, «casi 670 presos a disposición de la Justicia federal” en comisarías de la provincia. “En la Unidad Regional I hay 370 presos alojados en comisarías. Con esta cárcel federal, esperamos que en (el departamento) La Capital y otros departamentos linderos no haya más presos, al menos de forma permanente, en comisarías”, se entusiasmó el ministro.
Como correlato, dijo, el personal policial actualmente ocupado en vigilar a los detenidos podrá volcarse a tareas de calle: “Esto nos permite que los patrulleros salgan a la calle a cuidar a la gente y no estén haciendo mandados a Tribunales, o llevando el preso al médico”, resumió.
Cococcioni fue consultado sobre el complejo penitenciario después del acto que encabezó en la ciudad de Santa Fe, junto a la vicegobernadora Gisela Scaglia, para conmemorar el 11º aniversario de la creación de la Policía de Investigaciones (PDI) para acompañar el diseño del nuevo Sistema Procesal Penal que rige en la provincia.
Una escena falsa
La ministra Bullrich publicó en diciembre videos y fotos de los primeros presos ingresando a la cárcel corondina que rápidamente se expusieron como un montaje, porque la inauguración del penal era imposible en las condiciones en las que estaba. Fueron detenidos «prestados para la ocasión» y una puesta en escena que enojó al intendente local, Ricardo Ramírez. “A la cárcel le falta mucho, le falta agua. La unidad penitenciaria de Coronda no tiene ningún interno. Fue más una puesta en escena porque los presos llegaron de (la localidad bonaerense de) José C. Paz a las 5 y media de la mañana, con un operativo innecesario, nosotros no estamos acostumbrados a estas cosas. Pasaron por el escáner, se filmaron y a la media hora estaban volviendo a su lugar”, detalló el armado falso.
Para el intendente, la escena fue “un gasto innecesario” en un contexto en el que el Gobierno de Javier Milei pregona el ajuste bajo el lema de “no hay plata”. “Más allá que algunas cosas que comparto con este Gobierno, lo de Coronda fue vergonzoso”, dijo entonces Ramírez. Recordó que se viene trabajando hace un año para que la cárcel de Coronda esté en condiciones de albergar reclusos, pero que aún no sabían, entre otras cosas, dónde serían ubicados los empleados del servicio penitenciario, un tema que este martes Cococcioni reconoció que falta resolver. “Yo creo que no hacía falta todo este circo para una inauguración que sabíamos que era inviable”, había reprochado el pasado 20 de diciembre el jefe político corondino.