La 5°edición de la Kitty Feria regresa a la ciudad este sábado 7 de octubre, a partir de las 17. En esta edición, combinará la temática felina con el arte contemporáneo. La propuesta estará dividida en tres galerías: Gabelich Contemporáneo (San Juan 911), Crudo Arte contemporáneo (Italia 1044) y Estudio G (Catamarca 1427). En cada galería, los artistas ofrecerán propuestas inspiradas en temática felina que se sumarán a la muestra exhibida. Además, habrá stands de emprendimientos con productos de y para gatitos, música, tragos, actividades, talleres de arte, lectura de poesías y un sorteo con más de 50 premios. La entrada es gratuita, desde las 17 hasta las 22.
Orly trabaja como fotógrafa en galerías de arte de Rosario y Buenos Aires. Además, coordina Kitty Sitter, un emprendimiento de cuidado de gatos a domicilio. “Quise unir las dos pasiones. Hay mucho arte inspirado en felinos y es una oportunidad para que los artistas puedan mostrar su trabajo”, señaló. Además, busca que las personas puedan incluir las visitas a galerías de arte en su recorrido habitual: “Por Kitty conozco a mucha gente y estoy en contacto con una comunidad que cree que el arte es inalcanzable. Quiero fusionar ambos públicos para que las personas que no van a galerías tengan un motivo para entrar. Que sea un ambiente relajado y festivo, donde ver la obra, conocer a los artistas, y bajar el arte de un pedestal. Me interesa que la gente pueda incluir en sus actividades visitar galerías de arte”.
Niñeras de gatitos
Kitty Sitter comenzó en enero de 2019 como un servicio de cuidado de gatitos a domicilio. “Le cuidaba gatitos a amigos y vecinos cuando se iban de viaje y me dí cuenta que era un servicio necesario porque a los gatitos no los podemos sacar de casa: son territoriales, se estresan con los cambios y no tenemos guardería. Lo ideal es que puedan quedarse en su casa, con sus rutinas, olores y cosas. Para no poner en compromiso a familiares y vecinos, armé una página y empecé sola con un servicio de visitas a domicilio. Fue un éxito”, contó Orly sobre el emprendimiento que hoy nuclea a cerca de 20 cuidadoras.
Las visitas son de una hora en la que las cuidadoras cambian el agua de las mascotas, limpian las piedras, las alimentan, juegan y miman. Si algún tutor solicita una visita más prolongada, las cuidadoras se acercan al domicilio en diferentes momentos del día. Mantienen una entrevista previa con el tutor para conocer la rutina de cada gatito y, una vez en la vivienda, le envían la ubicación en tiempo real, junto con fotos y videos de sus mascotas.
La época de más demanda son las fiestas y los feriados largos. Al principio, las cuidadoras eran personas cercanas a ella, luego se incorporaron clientas y, en la actualidad, hay un formulario para quien esté interesado en sumarse. “Me fijo los perfiles, si tienen algún tipo de experiencia, si tienen mascotas. Soy muy cuidadosa con quienes sumo al equipo ya que es un trabajo de mucha responsabilidad”, señaló.
Para la catsitter es fundamental que el gatito no se sienta amenazado con su presencia. “Hice capacitaciones, se cómo entrar y encarar a un gatito agresivo o tímido. Hay gatitos sociables, tímidos que se esconden, y otros con tendencia a responder de forma agresiva ante la presencia de un extraño en su territorio. Hay ciertas técnicas que trato de transmitir a las cuidadoras que trabajan conmigo sobre cómo entrar a las casas y trabajar con respeto en el espacio crítico: no tocarlos apenas entrás, no hacer contacto visual, dejar que nos huelan antes, no caminar hacia ellos sino de costado. La idea es darles el espacio que necesitan y que no se sientan amenazados”, contó.
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