Daniel Erbetta, presidente de la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe, y el gobernador de la provincia, Miguel Lifschitz, firmaron en la sede de la Gobernación un convenio por el cual el Poder Ejecutivo y el Poder Judicial asumieron el compromiso de poner en funcionamiento el nuevo edificio de Justicia Penal en Rosario a fines de octubre. También acordaron que a más tardar el viernes 7 de julio próximo la obra deberá ser entregada por el Poder Ejecutivo al Poder Judicial, fecha a partir de la cual correrán 120 días para finalizar los trabajos de equipamiento indispensables para el normal funcionamiento de la Justicia penal. Para cumplir en forma y tiempo, ambas partes pusieron a disposición los equipos técnicos y las instalaciones necesarias para desarrollar las tareas convenidas.
Vale recordar que al nuevo edificio, ubicado en la manzana delimitada por las calles Virasoro, Sarmiento, Rueda y Mitre, se trasladarán los magistrados penales de primera instancia, la Oficina de Gestión Judicial de primera instancia y las delegaciones rosarinas del Ministerio Público de la Acusación y del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal.
Además, Lifschitz y Erbetta acordaron la constitución de un comité de implementación coordinado de forma conjunta por Erbetta y Ricardo Silberstein, ministro de Justicia y Derechos Humanos de la provincia. El órgano estará integrado además por representantes del gobierno, de la Corte, del Ministerio Público de la Acusación y del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal.
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