Lisandro Olearo
Tras los nuevos números que dejaron la primera fecha de la Copa de Europa, “El Hincha” esperó a que el rosarino Juan Imhoff regresara a París para dialogar y conocer las sensaciones del ex Duendes luego de meterse entre los cinco trymans históricos de la Copa de Europa, y único extranjero en el Top 10. Además, el wing de Racing 92, que ante Northampton se despachó con un doblete, habló sobre la competencia que tiene que con su amigo y ex compañero, el irlandés Simon Zebo, hoy en Munster de Irlanda.
“La sensaciones de estar entre los cinco, es el laburo de todo el equipo. Los premios individuales en este deporte son difíciles de analizar, pero en este caso es sobre un lapso largo de tiempo y estoy contento y orgulloso de la carrera que construí y seguir haciéndolo hoy, entonces eso es lo más importante que tiene esto de estar entre los cinco trymans, algo que no fue de un año para el otro, es algo que se fue laburando y manteniéndose el mismo nivel”, dijo Imhoff en el arranque de la charla con El Hincha.
Juan Imhoff está muy cerca de seguir escalando entre los máximos artilleros de la Copa de Europa, pero además está a pasos de llegar a los cien tries con la camiseta de Racing 92. El back suma 95 y atraviesa un presente muy prometedor.
Y lo más novedoso fue al referirse a la competencia interna que tiene con Simon Zebo, su amigo y ex compañero en Racing. “Empiezan a llegar los números, saber a cuántos estoy de los de arriba, la realidad es que cuando estaba Simon Zebo en Racing 92, competíamos para ver quién iba a quedar en el Top 3 de la Copa de Europa, pueden ver que ya le mandé un mensaje cuando estábamos volviendo de Inglaterra y él respondió con unos videos diciendo que no me agrande, porque él había estado con el tema del Covid encerrado porque había jugado en Sudáfrica y que no había podido jugar, pero que el fin de semana que viene jugaba y me volvía a dejar atrás. Mi respuesta fue inmediata, que no se preocupe que estaba primero, que esta era una sana competencia. Nos reímos mucho con Simon, aunque ahora estoy muy al tanto de los números que faltan. Pero repito, es la performance de un equipo. Hace un mes en Francia, todos hablaban de lo malo de la transición por la que estaba pasando el equipo y ahora, de golpe, el equipo juega bárbaro. Tampoco hay que volverse locos, hay que seguir laburando en las mismas bases porque todo es una consecuencia del trabajo hecho”, expresó Juan.
La tabla de trymans históricos de la Copa de Europa quedó de la siguiente manera: el líder es Chris Ashton (Inglaterra) 40; luego vienen Vincent Clerc (Francia) 36, Brian O’Driscoll (Irlanda) 33, Simon Zebo (Irlanda) 32, Juan Imhoff (Argentina) 31, Tommy Bowe (Irlanda) y Dafydd James (Gales) 29, Shane Horgan (Irlanda) y Andrew Trimble (Irlanda) 27 y Gordon D’Arcy (Irlanda) 26. Sólo siguen en actividad: Ashton (Sale, Inglaterra) y Zebo (Munster), el resto están retirados.
El primer try de Juan en Copa de Europa fue 11 de noviembre de 2011, días después de su llegada a París. Pasaron diez años y el wing formado en Duendes se ubica entre los mejores de su puesto. “Cuando llegué en 2011, el club no competía en la Copa de Europa por distintas razones, por ahí porque no tenía el doble plantel, o la cantidad de gente necesaria, pero siempre fue algo que estuvo en la mira del club, y más a partir del 2013/2014, cuando los planteles se fueron agrandando, ahí llegamos a cuartos de final de la Champions contra Saracens, y después obviamente fue el crecimiento del club. Hoy en día se volvió un objetivo y una presión linda, porque se juegan los dos torneos, para Racing estar en la fase final de la Copa es un objetivo, y para mí, con lo lindo que es este torneo, con el cambio arbitral, con las distintas canchas, diversidad de rivales y que quieren jugar más, no hay nada que perder y mucho por ganar. Entonces los equipos juegan más y se hace más divertido y dinámico. A mí me cierra por todos lados, me encanta jugar la Copa y además se respira algo totalmente diferente cuando arranca la Copa de Europa”, cerró Juan.
Luego de la extensa charla hubo un hasta luego, Bastián, su hijo de dos años, lo estaba llamando para ir a jugar y es un pedido al que el rosarino no puedo rehusarse. Y rápidamente, como si fuese a apoyar un nuevo try, Juan se despidió y corrió a desplegar su magia como padre.
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