El verano está a pleno en la costanera de la ciudad. Desde temprano, decenas de rosarinas y rosarinos se acercan diariamente al balneario La Florida para disfrutar la temporada en contacto con el río y la naturaleza. Cada lunes y miércoles unos cincuenta jóvenes del distrito Norte llegan a participar del programa Barrios de Cara al Río. Desde 2012 el municipio busca enseñar un buen uso del río y la costa a estos jóvenes de 12 a 15 años que asisten a los Centros de Convivencia Barrial (CCB) de Nuevo Alberdi, Travesía, La Esperanza y Los Cedros.
En el corazón del proyecto están educadores de los CCB y de la Dirección de Juventudes. También participan profesores de educación física de la Subsecretaría de Deportes municipal. En total, el equipo suma quince personas para formar lazos de confianza y contención.
“Tiene que ver con la inclusión, la garantía de derechos, el acceso al río, y a su vez aprender una disciplina deportiva que genera nuevos hábitos. Acá los chicos de los distintos barrios se encuentran. Esta es una forma de que muchos adolescentes y jóvenes no pasen por situaciones violentas”, explicó Mónica Peralta, subsecretaria de Desarrollo Social.
De 9 a 13 las chicas y chicos hacen distintas actividades organizadas en estaciones rotativas: natación, canotaje y Orilla Recreativa. “Las dos primeras incluyen la práctica deportiva y la diversión responsable en el río. La tercera abarca diferentes propuestas culturales o recreativas”, señaló Pablo D’Orazio, uno de los fundadores del programa y profesor del CCB Los Cedros.
Hay clases de cocina, de natación –que se desarrolla íntegramente dentro del espacio de boyado seguro del balneario– y tambén una práctica de rescate en el agua, entre otras actividades.
Otra tradición de Barrios de Cara al Río es el cruce anual que este año será el 6 de febrero. Los más experimentados se embarcarán por primera vez en una travesía costera por la isla con distintos kayaks. “Es una atracción pero también es un derecho. Es entender que no es un deporte para pocos. El kayak ya es parte de sus vidas. Más que una actividad, es una forma de vincularnos con el río y con la ciudad”, afirma Rocío González, directora de Juventudes.
De marzo a noviembre los encuentros del programa continúan en los CCB trabajando cuestiones más teóricas referidas al medio ambiente. Otras actividades están previstas en la pileta climatizada de un club de zona norte. En 2018 fue en el Club Teléfonos Rosario.
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