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Nuevos desafíos

Jóvenes con matrícula: una comisión de Ciencias Económicas agrega valor para superar la robotización

"Conozca a su cliente", una máxima que viene de los orígenes de la profesión, aparece hoy como una directriz para sostener el futuro. La vicepresidenta de la Comisión de Jóvenes, Florencia Allemand, cuenta cómo piensan las ventajas personales en contraposición a las aplicaciones automatizadas


Ellas y ellos tienen sólo 32 años o menos, pero están aventurando el futuro de toda una profesión, o al menos de buena parte de sus ramas. Ése es el principal desafío que cargó la Comisión de Jóvenes del Consejo Profesional y del Colegio de Graduados de Ciencias Económicas. ¿Cuál va a ser la tarea del contador en un mundo hípertecnologizado, con aplicaciones y software cada vez más eficientes y automáticos, tanto, que puede llegar a desdibujar la profesión? “Conozca a su cliente”, es la respuesta que ensaya Florencia Allemand, actual vicepresidenta de la Comisión –la presidió en 2019– apelando a una de la premisas históricas de la profesión como ensayo para el futuro. “Todo lo que sea tarea rutinaria va a ser reemplazado por la robótica; requiriendo de parte del profesional un control, sí, pero no más que eso”, puntualiza Allemand, tras decir que su matrícula es la 19843: como sus colegas, forma parte de la campaña “Soy matriculado”, destinada a garantizar la total transparencia en el sector.

 

 

Allemand, como los demás miembros de la Comisión, realizan visitas periódicas a las universidades, contactan con estudiantes que cursan sus últimas materias, se vinculan con los graduados recientes, exhiben las múltiples actividades que trazan –aún en pandemia– y buscan romper la capa de hielo que, a veces hasta por vergüenza, como admite que le ocurrió a ella misma distancian a la institución de las y los jóvenes que inician el tránsito desde el claustro al mercado laboral.

Precisamente cuando la pandemia arreció la Comisión tuvo un valor extra: las y los jóvenes ya contaban con una experticia natural en encuentros virtuales y uso de herramientas de comunicación que les permitieron continuar con las actividades sólo cambiando de formato, experiencia que ya tenían por profesionales que no eran de Rosario y se recibían y regresaban a sus lugares de origen, pero querían participar de las capacitaciones, uno de los pilares de la institución.

Allemand ratifica la importancia de la Comisión, pero más de “la mirada de apertura” que tienen las y los jóvenes, no sólo en ciencias económicas sino en todas los ámbitos, y explica que también se trazaron relaciones horizontales con comisiones análogas de otras instituciones similares de otras áreas: “El joven profesional tiene una mirada renovada que dista de la del profesional tradicional”, puntualiza. Y, desde esa mirada, se enfoca las características del ejercicio profesional que vendrá que –postula– más que “un perfil de técnico experto”, tendrá en el “asesoramiento profesional” su eje principal. “Conocer al cliente, conocer al máximo que necesita de mí y afianzar equipos de trabajo”, apunta, y define las aristas como “habilidades blandas” en las que ya se estaba basando la labor. “Tenemos que salir un poquito de lo rutinario, de las tareas reiterativas operativas, de estar permanentemente robotizando y parametrizando, para pasar a esta fase de planificación y asesoramiento. La realidad profesional nuestra cambió, y el cambio se está dando a nivel país. Y si no nos involucramos desde jóvenes, es difícil lograrlo. Siempre la participación es el motor del cambio”, señala.

Para ello, entre los horizontes de la Comisión de Jóvenes el primero se basa en el involucramiento, para anticiparse y “construir la realidad” de lo que vendrá. Y un pilar que marca Allemand es la “jerarquización profesional”, algo que se logra en conjunto, más allá del talento individual que tenga cada joven profesional, ya que por afuera “tarde o temprano se va a quedar atrás”. En ese marco, la dirigente vuelve a hacer hincapié en la matriculación profesional, que más allá de un sentido de pertenencia –que lo hay– implica la capacitación continua, el acceso a una red de colegas con la misma búsqueda y una “red de contactos”, que impacta también en oportunidades laborales. “Lo importante es asistir a la comisión”, completa.

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