Espectáculos

Aniversario

Jorge Fandermole, el artista que le puso música al dolor de aquel “Junio” de hace veinte años 

El impacto de los crímenes de los militantes Maximiliano Kosteki y Darío Santillán en aquella asonada represiva hizo que el músico y compositor, uno de los grandes referentes de la música popular argentina, creara una canción que desde entonces resuena como un bello alegato de ese acontecimiento


Sergio Arboleya, Télam 
El impacto de los crímenes de los jóvenes militantes Maximiliano Kosteki y Darío Santillán en aquella asonada represiva hizo que el músico y compositor Jorge Fandermole, reconocido por sus aportes autorales al cancionero de la llamada Trova Rosarina, pero asimismo inspirado hacedor de nueva obra para la música popular, creara la canción “Junio”, que desde entonces resuena como un bello alegato de ese acontecimiento.

“La canción «Junio» fue compuesta inmediatamente luego de que se hicieran públicos los sucesos de Puente Pueyrredón como una respuesta íntima a la inmensa conmoción, tristeza y angustia que personalmente tuve ante los hechos”, deslizó el rosarino Jorge Fandermole a la agencia de noticias Télam.

Pero el autor de gemas como “Oración del Remanso”, “Cuando”, “Canción del pinar”, “Sueñero” y “Canto versos”, entre más, confesó: “Debo decir con sinceridad que tuve mis contradicciones respecto de la práctica de los piquetes y en un principio me costó aceptar su legitimidad como medida de fuerza”.

“Lleva tiempo interpretar las nociones de necesidad y los desequilibrios e inequidades que justifican los comportamientos sociales, y los piquetes siguen siendo condenados por sectores a quienes no convienen, porque lleva tiempo asimismo aceptar la práctica de un pensamiento crítico que, como tal, no admite los sesgos del interés personal o sectorial, ya que con ese criterio sólo sería legítimo lo propio”, reflexionó el guitarrista y cantante.

“Junio”, luego, se integró al repertorio de su disco Pequeños mundos (de 2005 y séptimo de los ocho álbumes publicados hasta ahora), puede escucharse en YouTube en una estupenda versión compartida con Raly Barrionuevo y tuvo, entre otras, un abordaje tanguero propuesto por Carlos Varela junto al rosarino Juan Carlos Baglietto para su placa Lo que el tiempo me enseñó (2014).

Respecto de qué aportó “Junio” como canción y como emergente al conjunto de su obra, Fander detalló: “Cada nueva canción es una emergencia con una potencialidad que no se puede prever y, también, cuesta analizar a la distancia cuánto y cómo modifica el resto de lo hecho. En principio significó para mí un enorme compromiso respecto de cómo usar el lenguaje, cómo decirlo, porque la gravedad y el horror de esos crímenes ya estaban sobradamente documentados por la crónica periodística. Entonces uno se pregunta qué más hacer, qué más decir y cómo decirlo. Supongo que esos interrogantes sobrevuelan toda la composición posterior”.

El músico también habló acerca cuál siente que es el vínculo entre la coyuntura sociopolítica y sus canciones: “Por la celeridad y la abundancia de acontecimientos en el plano socio-político no creo poder estar al día ni tener la capacidad de componer con la frecuencia necesaria algo de cierto valor que lo justifique, sobre todo si el anclaje es coyuntural. Hay canciones que son crónicas de la realidad cotidiana de un pueblo o una sociedad y se agotan inmediatamente porque su contenido es perecedero, y otras que trascienden lo inmediato. Yo no soy capaz de hacer esas previsiones. Estoy atento al mundo, pero el mayor conflicto se desarrolla en los lenguajes, y entre ellos están los artísticos, todos están en crisis porque los sistemas lo están. A veces uno no sabe dónde recortar el mundo ni cómo decirlo, y otras veces hay una lucidez mayor y deja alguna canción afortunada donde lo real queda testimoniado, transfigurado y tal vez hecho memoria”.

En el mismo sentido, el músico reflexionó acerca de lo que siente hoy al cantar o escuchar esa canción: “Al cantar hoy esa canción percibo que retomo la memoria no sólo de los sucesos sino también de un contexto histórico. Es un modo de no olvidar”.

Y en el mismo plano analizó finalmente por qué esa conmoción que lo llevó a componer “Junio” no alcanzó a otros colegas de la canción popular: “Estoy seguro que esa conmoción fue colectiva y alcanzó a todas las personas sensibles y por supuesto a mis colegas de la canción popular. Pero lograr hacer algo al respecto, traducirlo, por decirlo de algún modo, y quedar conforme, no es una mera cuestión de decisión o voluntad, ni mucho menos de capacidad. También es necesario que el azar te lo autorice, tener el tiempo y la energía que te permitan hacerlo. Yo escucho frecuentemente canciones muy lúcidas de mis colegas que dicen casi exactamente lo que yo hubiese querido decir, pero no lo dije, o no lo vi, o no estaba en el lugar y el momento indicado, o no pude. Pero todo esto parecería una reflexión vana sobre una obra, o sobre el arte y sus lenguajes si no recobramos la dimensión y la extensión histórica y política de los asesinatos de Kosteki y Santillán, y cómo resuenan en las luchas sociales actuales sus militancias y sus ejemplos”.

Comentarios