Involución. Los Pumas perdieron por 35 a 25 con Inglaterra en un test match disputado en un estadio de Colón de Santa Fe que lució colmado. Argentina no pudo volver a jugar en el nivel del pasado sábado en San Juan, en donde también perdió ante los ingleses. Fueron titulares los rosarinos Jerónimo de la Fuente y Emiliano Boffelli.
El próximo sábado en Jujuy, los dirigidos por Daniel Hourcade se miden con Georgia, un rival de menor jerarquía, pero que con el presente argentino, el resultado es una incógnita.
Con un comienzo de partido que hizo ilusionar, Los Pumas se pusieron a jugar de igual a igual ante Inglaterra, que nunca se desesperó y ni siquiera perdió los estribos. Fue sólo un oasis de buen rugby para los dirigidos por el tucumano Daniel Hourcade, porque después llegaron a anotar puntos con arrestos individuales o por errores ingleses.
El gran desafío de Argentina era poder jugar mejor que en San Juan. Pero no lo logró. Ayer Inglaterra no hizo gran cosa pero su regularidad le dio otro triunfo. Los británicos desarrollan muy bien el abecé del rugby y eso les basta para ganar. A Argentina le sigue costando ganarle a los grandes.
Es hora de un golpe de timón. No de cambiar a los entrenadores, porque Los Pumas están en medio de un proceso mundialista. Hay que pensar en algo distinto. El 2017 es la última temporada para probar jugadores. Después Japón está a la vuelta de la esquina y es el torneo donde Argentina tiene que revalidar un cuarto puesto.
Y lo más alarmante es que todavía queda por delante disputar otra edición del Rugby Championship ante los poderosos del Sur.
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