Policiales

apuntan al parentesco de la víctima

Crimen en La Carne se enmarca en saga de sangre y fuego, aseguran

En el caso interviene el fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos Ademar Bianchini y el Gabinete Criminalístico de la PDI.


El crimen de un joven de 29 años sacudió los confines de la zona sur de Rosario, en el tradicional barrio La Carne. La víctima, identificada como Leandro Rafati, fue emboscada este lunes por la tarde por los ocupantes de dos automoviles en calle Rui Barbosa al 400. No se sabe cuántos plomos hicieron blanco en el cuerpo pero murió a los pocos minutos, dijeron fuentes policiales. Una fuente confió a este diario que el asesinato está vinculado con la disputa de sangre que abate el sur de Rosario y se extiende a otras zonas de la ciudad, esto es, el conflicto que entre sectores del barrio Municipal y del Parque del Mercado, cuyas figuras más notorias son el clan Funes y el entorno de Alexis Caminos. En este sentido agregó que la víctima era pariente de Marcela Díaz, la joven asesinada el domingo pasado, quien a su vez era hermana de Tubi Segovia, un barra leproso que los investigadores vinculan con los Caminos. En tanto, fuentes judiciales agregaron que horas después del crimen la Policía detuvo a dos cuadras del hecho a una mujer y se le secuestró un revólver. Sin embargo, la chica quedó en libertad por no poseer antecendentes, aunque se le armó una causa por tenencia de arma de fuego, indicaron, a la vez que se la investiga por una posible vinculación con el asesinato.

Según el relato de los deudos, un primo despertó a Rafati de la siesta y salieron a la calle. Eran las 15.30. Fue en ese trayecto que, según los voceros del caso, Rafati iba de acompañante en una moto y fue encerrado por un Peugeot 206 gris que estaba secundado por un Fiat 147. Desde este automóvil, de acuerdo a los voceros del caso, salieron las balas que acabaron con la vida de Rafati, que luego de caminar unas cuadras malherido quedó tendido sobre la calle por los disparos en la espalda y la cabeza.

“La víctima era pariente de la chica asesinada el domingo”, afirmó una fuente oficial a El Ciudadano. Se trata de Marcela Díaz, hermana de Ariel “Tubi” Segovia, quien hoy está preso por un homicidio y se lo vincula con el paravalanchas leproso. De acuerdo con esta versión, la ejecución de Rafati se enmarca en la saga de vendettas que recrudeció en las últimas semanas y en los últimos dos años lleva 35 muertos en los últimos 22 meses.

Desde el Ministerio de Seguridad se informó que un amigo que acompañaba a Rafati, al arribo de la Policía, apuntó el nombre de uno de los supuestos tiradores. Con estos datos, siempre según la versión oficial, el Comando llegó a Rui Barbosa al 600 –a dos cuadras de donde murió Rafati– se logró detener a una mujer, Lorena G., durante un patrullaje de madrugada. Según consignaron, la chica se aprestaba a entrar a una casa y portaba un arma de fuego.

Por la tarde, cuando llegaron las cámaras de televisión al lugar, familiares de Rafati estallaban en dolor. “Estaba durmiendo la siesta y un primo lo fue a buscar”, dijo una familiar que agregó que el crimen “no es un ajuste de cuentas; me lo mataron como un perro”.

En tanto, un conocido de la víctima arriesgó la hipótesis de un ajuste de cuentas. Identificó a la víctima con el apodo de Tuky y dijo que el crimen se debe a “problemas de drogas y territorio”, aunque no aportó precisiones. La víctima “laburaba pero tenía problemas. En rosario todo es ajuste de cuentas hoy en día. Todo mambo de los Funes”, señaló este vecino, que aventuró también la hipótesis que la muerte de Rafati está relacionada con el apellido del clan que más protagonismo tuvo en las crónicas policiales de los últimos 20 días.

La versión de este muchacho, que prefirió mantenerse en el anonimato, es opuesta a la primera versión de Fiscalía, que ayer consignó: “Los primeros testimonios dan cuenta de un posible problema interfamiliar, por el momento no hay elementos que lo vinculen con los últimos hechos de homicidios ocurridos el fin de semana”.

detenida con un calibre 44

Según fuentes judiciales, Lorena G. cayó detenida esta madrugada a las 3.30 en Rui Barbosa al 600; un móvil policial observó a la mujer en actitud sospechosa portando un objeto que parecía ser un arma. Cuando se la detuvo, se le secuestró un revólver calibre 44, agregaron los voceros del caso.

A la detenida se le armó una causa por el delito de tenencia de arma de fuego que está en manos del fiscal de la Unidad de Flagrancia Matías Edery. Al no contar con antecedentes, Lorena G. quedó en libertad, agregaron. Y si bien no hay una hipótesis para vincular a la chica con el asesinato de Rafati –tal y como deslizaron más temprano otras fuentes oficiales–, la investigación continúa, señalaron.

La investigación del crimen de Rafati está a cargo del fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos Ademar Bianchini, con asistencia de la PDI.