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Perezoso gigante

Investigadores del Conicet encontraron el megaterio más antiguo de la Argentina cerca de Miramar

Calculan que datan de hace tres millones y medio de años. Hallaron el cráneo en singular estado de conservación. El descubrimiento alimenta nuevas preguntas sobre esta especie que se extinguió hace 10 mil años. Medía hasta cinco metros y pesaba seis toneladas


El cráneo casi intacto de uno de los perezosos gigantes que llegaron a pesar seis toneladas y deambulaban por la hoy Argentina hasta hace 10 mil años, es la punta de un reciente hallazgo paleontológico relevante. Son los restos del megaterio más antiguo del que se tenga conocimiento en el territorio nacional, sólo comparables con los encontrados en Bolivia. Calculan que datan de hace tres millones y medio de años. El mérito corresponde a investigadores del Conicet que trabajan en Diamante, Entre Ríos, quienes exploraron la orilla de San Eduardo del Mar, cerca del balneario bonaerense de Miramar.

El trabajo de investigación corresponde a un equipo del que participa Diego Brandoni, investigador del Conicet con sede en el Laboratorio de Paleontología de Vertebrados del Centro de Investigación Científica y de Transferencia Tecnológica a la Producción de Diamante. El estudio fue publicado en la revista científica Journal of South American Earth Sciences.

El megaterio fue un enorme perezoso terrestre que alcanzó los 5 metros de longitud y las 6 toneladas de peso. De hocico estrecho, los indicios apuntan a que tenía una larga lengua con la que podía arrancar las ramas de los vegetales que constituían su alimento. Sin embargo, también tenía grandes garras, por lo que algunos especialistas creen que podría haber sido carnívoro.

La particular fisonomía y tamaño de los megaterios los hacen un animal misterioso que ha despertado especial interés en el mundo científico. Algunos especialistas sostienen que pudo haber sido enteramente pelado, como los elefantes y los rinocerontes, y no con pelo como sus descendientes actuales, los conocidos perezosos.

“Resultó sumamente asombroso que el cráneo de megaterio hallado, en muy buen estado de conservación y perteneciente a un ejemplar juvenil, tenga una antigüedad cercana a los tres millones y medio de años, lo que cual lo sitúa en el Plioceno de nuestra Región Pampeana. Los fósiles de Megatherium son comunes en casi todo el territorio argentino pero esta es la primera vez que se encuentran restos tan antiguos, sólo comparables a los de un hallazgo realizado en Bolivia hace algunos años”, resaltó la trscendencia del hallazgo el investigador Brandoni.

El Megatherium, género extinto de mamíferos, fue descubierto por primera vez a fines del siglo XVIII. A partir de allí, hubo muchos hallazgos que permiten considerar que este enorme perezoso terrestre habitó América del Sur hasta hace unos 10.000 años, época en que la que quedó definitivamente extinguido, especialmente por la acción de los cazadores.

En el contexto de los conocimientos disponibles, según Brandoni, “este descubrimiento de un megaterio tan antiguo en las planicies pampeanas nos revela que la historia de estos enormes perezosos es poco conocida y, muy probablemente, sea mucho más compleja de lo que se cree. Este hallazgo abre otra perspectiva sobre los megaterios en nuestro suelo”.

El cráneo de Megatherium encontrado pasó a engrosar las colecciones del Museo de Miramar. Los científicos del grupo siguen investigando a la luz del nuevo hallazgo. Estudian en especial la distribución geográfica y cronológica de distintos grupos de vertebrados –las faunas de Neógeno y del Cuaternario del área Mesopotámica argentina– y su vinculación con otras asociaciones faunísticas de la Argentina y América del Sur.

El estudio fue resultado del esfuerzo interdisciplinario entre investigadores pertenecientes a diversas instituciones: Fundación Azara, Museo de Ciencias Naturales de Miramar, laboratorio Lacev del Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia, Centro de Geología de Costas y Cuaternario de la Universidad Nacional de Mar del Plata y Centro de Investigación Científica y de Transferencia Tecnológica a la Producción.

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