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Deuda pendiente

Impulsan un nuevo proyecto para que Santa Fe sancione una Ley de Educación Sexual Integral

La diputada del bloque socialista Gisel Mahmud presentó en la Legislatura provincial una iniciativa para que la provincia garantice los derechos sexuales y reproductivos de jóvenes en escuelas públicas y privadas. Un propuesta similar que tenía media sanción perdió estado parlamentario


Arte El Ciudadano

La diputada del bloque socialista Gisel Mahmud presentó en la Legislatura provincial un  proyecto para sancionar la Ley de Educación Sexual Integral y garantizar su acceso a las y los jóvenes en los establecimientos educativos públicos de gestión estatal y privada. La iniciativa busca saldar la deuda legal que quedó cuando el proyecto del ex Diputado “Paco” Garibaldi, que en 2018 había obtenido media sanción, perdió estado parlamentario en el Senado Provincial. A la Cámara de Diputados también ingresó otro proyecto similar del bloque de centro-izquierda Igualdad. La norma fue sancionada en 2006 a nivel nacional y es aplicada en la provincia desde 2008, primero con capacitación a docentes y después a los centros de estudiantes, protagonistas en la demanda de ESI en las escuelas. Su aplicación permitió que durante el ciclo lectivo 2019 el Ministerio de Educación de Santa Fe detectara 493 situaciones de abuso sexual infantil y adolescente y 507 de violencia familiar. Los casos fueron relevados a partir del relato de niñas, niños y adolescentes y de la escucha de docentes, quienes ante la sospecha de abuso o violencia tienen la obligación de denunciar.

Garantizar derechos

“El proyecto anterior fue fruto de un amplio consenso y recibió un tratamiento positivo, que llevó a su aprobación en esta Cámara. Lamentablemente, pese a la media sanción que recibió en junio de 2018 luego perdió estado parlamentario en el Senado. Por eso considero importante volver a presentar esta iniciativa, convocando a que vuelvan a establecerse los consensos necesarios en el cuerpo que integro, y esperando que los senadores y las senadoras puedan advertir la importancia de avanzar en este sentido”, explicó Mahmud.

El proyecto propone la creación del Programa Provincial de Educación Sexual Integral, en el ámbito del Ministerio de Educación, que será coordinado por un equipo interdisciplinario compuesto por profesionales y especialistas provenientes de diversas disciplinas, con experiencia en formación docente, sexualidad, perspectiva de género y derechos humanos.

El texto prevé que cada establecimiento educativo incluya la educación sexual integral en su proyecto institucional y asegure la transversalidad e interdisciplinariedad de sus contenidos en la currícula, adaptándola a su realidad sociocultural.

“Las y los jóvenes de nuestra provincia tienen el derecho a recibir contenidos tendientes a satisfacer las necesidades de desarrollo integral de las personas y la difusión y cumplimiento de las derechos sexuales y reproductivos, definidos coma inalienables, inviolables e insustituibles de la condición humana”, señaló la diputada.

La iniciativa que presentó el 20 de mayo busca garantizar la “enseñanza y aprendizaje de la educación sexual integral mediante conocimientos científicos acordes a la edad, desde la perspectiva de género, promoviendo el reconocimiento de la diversidad y el derecho a la no discriminación; promover el cumplimiento del derecho a la autonomía, integridad y seguridad sexual, el derecho a la privacidad sexual, al placer sexual, a la expresión sexual emocional, a la libre expresión de la orientación y/o identidad de género, a la toma de decisiones reproductivas libres y responsables, y a la información basada en el conocimiento científico”.

También busca “impulsar acciones colectivas de cuidado y protección que favorezcan el ejercicio pleno de los derechos sexuales, reproductivos y la igualdad de trato y oportunidades entre géneros”, así como “informar y concientizar para la prevención y denuncia de la violencia en todas sus manifestaciones, abuso sexual, trata de personas y delito contra la integridad sexual”.

“La educación sexual integral representa un aprendizaje que debe ser incorporado a lo largo de toda la escolarización obligatoria, reafirmando especialmente la responsabilidad del Estado en lo que hace a la protección de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, y permitiendo formalizar y sistematizar saberes que históricamente quedaron circunscriptos a la esfera de lo privado”, agregó la diputada.

Sobre la mesa

A mediados de mayo los diputados del bloque de centro-izquierda Igualdad, Rubén Giustiniani y Agustina Donnet, ingresaron un proyecto que también busca la sanción de la ESI. La iniciativa fue elaborada con perspectiva de género, de diversidad y de derechos humanos, y postula la obligatoriedad de su enseñanza en los establecimientos públicos y privados, sean laicos o confesionales.

“El proyecto retoma las discusiones de la Comisión de Educación y las demandas de las organizaciones que siguen luchando por su implementación. Implementar la ESI significa garantizar aspectos claves de cada persona como pertenencias culturales, identidades de género y orientaciones sexuales, entre otras”, señalaron los diputados.

De ESI sí se habla

Durante el ciclo lectivo 2019 fueron detectados 1.000 casos: 493 de abuso sexual y 507 de violencia familiar. La mayoría fueron situaciones recientes, aunque también aparecieron casos en escuelas nocturnas y profesorados, donde adultos y adultas se dieron cuenta de que habían sido abusados en la infancia. En todos los casos detectados se activa un protocolo de acompañamiento y se da curso a la denuncia penal en la Justicia.

La ley nacional sancionada en 2006 fue pensada de manera integral para que atraviese a todas las materias desde el jardín hasta los estudios terciarios, aunque no todas las provincias la cumplen.

El gobierno de Santa Fe empezó a implementar la ESI en 2008 a través de la capacitación de docentes. En 2012 incluyó a integrantes de los centros de estudiantes, quienes fueron los principales demandantes de educación sexual en la escuela. La ESI se aplica desde el jardín hasta los institutos terciarios. En el caso de los profesorados funciona el ateneo, un espacio curricular dedicado exclusivamente a ESI. En el resto de los niveles la educación sexual debe atravesar todas las materias, además de las jornadas especiales que se hacen varias veces al año.

En Santa Fe se convirtió en una herramienta clave para detectar abusos sexuales y violencia familiar. No se reduce a clases de biología ni se trata sólo de que chicas y chicos sepan cómo prevenir un embarazo o cuidarse de las enfermedades de transmisión sexual. Busca pensar y construir vínculos libres de todo tipo de violencia a partir del respeto a la diversidad sexual y a las mujeres.

También sirve para que puedan diferenciar el cariño del abuso sexual y para que puedan denunciarlo. Los casos de abuso también son registrados ante la sospecha de docentes y directivos, que están obligados a denunciar, o de familiares y vecinos.

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