Ciudad

Por el pedido de sacar cruces

Imágenes religiosas: el Arzobispado le pegó duro al Concejo

A través de un comunicado, expresó su "asombro y dolor" por la sanción de la ordenanza a través de la cual se solicita al gobierno provincial que se retire de escuelas y hospitales esa simbología


El vicario general del Arzobispado de Rosario, Emilio Cardarelli, manifestó “dolor y tristeza” por la decisión del Concejo Municipal de pedir la remoción de imágenes religiosas en hospitales y escuelas públicas porque, señaló, “nuestra identidad está atravesada por la presencia de Cristo”.

En un comunicado del Arzobispado, Cardarelli sostuvo que la ordenanza aprobada por el Concejo local el último jueves generó “mucho asombro” y causó “dolor y tristeza”.

El vicario general recordó que la Constitución de Santa Fe establece que “la religión de la provincia es la Católica, Apostólica y Romana, a la que le prestará su protección más decidida sin perjuicio de la libertad religiosa que gozan sus habitantes”.

Además, pidió a los concejales que en lugar de distraer “sus energías en un tema como este” orienten su acción legislativa hacia “normas sabias y prudentes que contribuyan a la erradicación del narcotráfico, la drogodependencia, la violencia que asola la ciudad o el tema alimentario”.

El Concejo rosarino aprobó en su última sesión una iniciativa por la que solicita al gobierno de Santa Fe que retire imágenes religiosas de escuelas y hospitales públicos “en cumplimiento de los principios de libertad religiosa y conciencia” y “reforzando el carácter laico de la ciudad”.

La autora de la iniciativa, la concejala del Frente Social y Popular Celeste Lepratti argumentó que “este año en nuestro país se renovó el debate sobre la separación Iglesia-Estado, con una campaña federal que promueve debates acerca de la necesidad de un Estado laico y el financiamiento a la Iglesia católica”.

Al respecto, Cardarelli sostuvo que “innegablemente toda nuestra Patria, su geografía, su historia, su cultura, en una palabra, nuestra identidad, está atravesada por la presencia de Cristo y la devoción a su Santísima Madre”.

“Evidentemente no se trata aquí de la Iglesia y de su relación con el Estado, sino de afirmar que los símbolos e imágenes que expresan nuestra identidad cultural en modo alguno pueden ser atentatorios contra la libertad religiosa y de conciencia de los ciudadanos o contra el carácter laico de la educación pública”, agregó el vicario.

 

Comentarios