Un nuevo incidente dentro de un penal santafesino terminó con quema de colchones y varios heridos, esta vez en un pabellón que aloja a 80 internos de la Unidad Penitenciaria Nº 16 de Pérez. Al igual que lo ocurrido hace 15 días en el penal Nº 6 de Rosario, donde familiares de los detenidos llamaron a los medios para pedir información sobre sus seres queridos ante el silencio de las autoridades, el conflicto del sábado pasado trascendió recién este martes, cuando un grupo de madres se comunicó con El Ciudadano para denunciar las condiciones de salud de sus hijos privados de la libertad que sufrieron lesiones en el encierro.
“Están sin agua, sin comida y todos mojados desde hace días. Los engomaron (encerraron en sus celdas) el sábado y no sabemos nada porque las autoridades no nos informan. Hay dos chicos apuñalados, varios con balazos de goma en distintas partes del cuerpo y algunos muy golpeados”, dijo una mujer que tiene a su hijo detenido a este diario.
Consultada sobre los incidentes, la Subsecretaría de Asuntos Penitenciarios de Santa Fe informó que se trató de “una gresca el sábado a la noche” y que no contó con heridos de gravedad. La misma fuente precisó: “Hubo sólo dos traslados al hospital por postas de goma cercanas al ojo”; y que finalmente seis internos fueron trasladados a otras unidades penitenciarias. También se desmintió que haya habido quema de colchones, como aseguraron los familiares de los detenidos, sino que “algunos prendieron pedazos de goma espuma luego de que se procediera al cierre del pabellón”.
A fines del mes pasado, una situación similar se vivió dentro del pabellón 9 de la Unidad Penitenciaria Nº 6 (ex Alcaidía), cuando un grupo de mujeres se congregó en la puerta del penal de avenida Francia al 5400 para preguntar sobre sus familiares, mientras observaban humo negro que salía sobre el penal. En esa oportunidad, cuatro internos fueron trasladados al hospital con heridas de bala de goma, de arma blanca y quemaduras de distintos grados. Las autoridades informaron que no fue un motín sino una reyerta entre internos.
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