Más de un centenar de oficiales dela Policía Bonaerenseprotagonizaron ayer una protesta en rechazo a la medida del gobierno provincial de desafectar de la fuerza a seis efectivos que reprimieron a militantes deLa Cámporadurante el acto de asunción de Daniel Scioli. Después de diez horas de tensión, el acuartelamiento enla Divisiónde Infantería deLa Platafue levantado luego de que los efectivos acusados aceptaran ser desafectados de la fuerza solo mientras dure la investigación.
Así lo informaron en el departamento central deLa Plata, luego de que el gobierno bonaerense y el juez de garantías deLa Plata, César Melazo, ofrecieran “garantías de legítimo proceso” contra los efectivos imputados.
Los seis oficiales investigados gestionaron ante la asamblea el levantamiento de la medida de fuerza y hoy prestarán declaración ante el departamento de Asuntos Internos dela Bonaerense.
Según indicó el capitán Walter Revoredo, tras una mediación de Melazo, existe la posibilidad de que se “reincorpore a los seis efectivos” castigados y de que “no haya sanciones”.
La protesta se inició ayer a la mañana en la sede de Infantería, enLa Plata, donde alrededor de un centenar de efectivos y familiares de policías pidieron por la reincorporación de los efectivos sancionados.
Los policías mantuvieron una reunión con el subsecretario de Política Criminal e Investigaciones, César Albarracín, y luego con la cúpula dela Policíacon el fin de destrabar la situación.
Los seis policías habían sido separados el lunes pasado debido a los incidentes ocurridos durante la asunción del gobernador Daniel Scioli y su vice, Gabriel Mariotto, cuando un grupo de militantes deLa Cámporaintentó llegar a los palcos dela Cámarade Diputados donde se desarrollaba la ceremonia.
Sin embargo,la Policíales impidió el paso y reprimió a los militantes, dos de los cuales sufrieron heridas y debieron ser trasladados a un centro asistencial. Scioli dispuso desafectar a seis de los efectivos que participaron de la represión hasta tanto Asuntos Internos resuelva su situación. El ministro de Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, explicó que “no hay una negociación” con los efectivos en conflicto “porque se está aplicando el marco legal vigente”.
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