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Histórico acuerdo bilateral

Chávez y Santos se comprometieron en Santa Marta a reanudar las relaciones entre ambos países privilegiando la vía diplomática, respetando la soberanía y el principio de no injerencia.

Venezuela y Colombia reanudaron ayer relaciones diplomáticas tras un acuerdo firmado en la ciudad colombiana de Santa Marta entre los presidentes Hugo Chávez y Juan Manuel Santos, con la mediación del secretario general de la Unasur, Néstor Kirchner. Santos, acompañado por el presidente venezolano, Hugo Chávez, señaló al hacer el anuncio: “Hemos tenido un diálogo franco, directo y sincero y hemos dado un gran paso en el restablecimiento de la confianza”. Por su parte, Chávez dijo: “Vine aquí a voltear la página, hemos tenido una conversación franca, sincera”.

Al término de la reunión que culminó con la firma del llamado Acuerdo de Santa Marta, en la que además de Santos, Chávez y Kirchner estuvieron los cancilleres Nicolás Maduro y María Ángela Holguín, dijo el presidente colombiano: “El resultado ha sido positivo; en la declaración hemos decidido que los dos países restablezcan relaciones diplomáticas y relanzar una hoja de ruta con todos los aspectos que puedan profundizarse”. Agregó: “Tanto Chávez como yo estamos identificados en la necesidad básica de anteponer el bienestar de los pueblos sobre las diferencias”. “Vamos a construir una relación perdurable en el tiempo. Haríamos mal traicionando el mandato de nuestros pueblos”, remarcó.

Afirmó por su parte Hugo Chávez: “Hemos establecido principios, colocado la piedra fundamental de nuestra relación, ahora habrá que cuidarla”. Al respecto, dijo: “Ante cualquier chisme, debemos comunicarnos y restablecer la confianza. Hemos decidido restablecer las relaciones diplomáticas, políticas y económicas plenas”.

Acuerdo de Santa Marta

Reza el acuerdo rubricado anoche: “Los presidentes de Colombia y Venezuela acordaron en la ciudad de Santa Marta relanzar la relación bilateral restableciendo las relaciones diplomáticas entre los países con base en un diálogo transparente, directo, respetuoso y privilegiando la vía diplomática”.

Agrega que “este diálogo se llevará a cabo buscando garantizar la permanencia y estabilidad de la relación bilateral dando estricto cumplimiento al derecho internacional y aplicando los principios de no injerencia en los asuntos internos y de respeto a la soberanía, integridad territorial de los Estados”.

Los mandatarios también decidieron “avanzar en la integración bilateral en beneficio del desarrollo de los dos pueblos y particularmente de las zonas y comunidades fronterizas, donde acordaron impulsar programas conjuntos en materia social y económica. En efecto se crearon cinco comisiones de trabajo”.

El recorrido del consenso

El camino recorrido hasta el encuentro de ayer fue lento y cauteloso y las tres patas de las negociaciones, la Unasur y las cancillerías colombiana y venezolana, mantuvieron reserva durante unas horas sobre el lugar en el que se realizó el encuentro.

En tiempos de bicentenarios latinoamericanos, los días están cargados de fechas históricas que marcaron el camino de la independencia americana y el 10 de agosto es uno de ellas.

En este caso, coincide con un aniversario de la entrada de Bolívar a Santa Fe de Colombia tras haber vencido a los españoles en Boyacá, el 7 de agosto de 1819, dando comienzo a la creación de la Gran Colombia que años más tarde serían las repúblicas de Ecuador, Colombia y Venezuela.

El lugar elegido para la cita no es menos importante: se trata de la Quinta San Pedro Alejandrino, donde murió el libertador Simón Bolívar el 17 de diciembre de 1830. La confirmación de la reunión mostró a los presidentes Chávez y Santos esperanzados con su resultado.

“Espero que podamos sacar conclusiones que nos lleven a normalizar las relaciones entre los dos países”, había dicho Santos. “Estaremos trabajando duro para la reunión del martes (…) Vamos a iniciar una nueva relación para el bien de ambos países”, se había manifestado Chávez.

La reunión de ayer en Santa Marta comenzó a gestarse el jueves pasado en Caracas, cuando el titular de la Unasur, Néstor Kirchner, se reunió, con sus asesores Juan Manuel Abal Medina y Rafael Folonier, con el presidente Chávez y el canciller Maduro.

Esa noche al terminar la reunión Chávez aseguró: “Todavía no podemos hacer ningún anuncio, pero fue una reunión excelente”.

Al día siguiente, arribó a la capital venezolana el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quien se sumó a las conversaciones entre Kirchner y Chávez y se anunció, después de que compartieran un almuerzo, que el canciller Maduro asistiría a la asunción presidencial de Santos en Colombia.

Esa misma tarde, Néstor Kirchner arribó a Bogotá, para participar de la ceremonia de traspaso de mando junto a Cristina Fernández de Kirchner y se reunió en un hotel con Juan Manuel Santos para seguir adelante con las gestiones.

Por la noche, el canciller Maduro llegó hasta el hotel Marriot, donde se alojó Kirchner y mantuvieron otra reunión tras la que confirmaron el encuentro, realizado ayer, entre los cancilleres de Colombia y Venezuela. Surgió con más fuerza el consenso de que debía ser el bloque político de América del Sur el ámbito donde discutir las diferencias entre los dos países miembros.

La semana siguiente al 22 de julio, en que Chávez anunció la ruptura de relaciones, se realizó una reunión de cancilleres de Unasur en Quito y, días después, el entonces presidente electo Santos realizó una gira latinoamericana y en Buenos Aires fue recibido por Néstor Kirchner.

También llegó el canciller venezolano, quien en un encuentro con el titular de Unasur presentó un Plan de Paz para Colombia, para ponerlo a consideración de los mandatarios del bloque.

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