Una documentación de once folios, hallada en una calle de Barcelona con información sobre parte del dispositivo policial previsto para la visita del Papa para este sábado y domingo, “no contienen información sensible que afecte a la seguridad”, aseguró un portavoz policial.
Estos papeles fueron entregados a una radio catalana por un ciudadano que los había encontrado esparcidos por el suelo, entre los cuales figura un listado con veintiún nombres, números de teléfono y direcciones de correo electrónico de altos cargos de los cuerpos de seguridad.
Además, consta el número de efectivos que actuarán, 20.000, y otras necesidades materiales del operativo, así como el momento del despliegue del plan de seguridad y los hoteles de Barcelona donde se alojará el cortejo de Benedicto XVI, indicó la emisora.
Si bien se trató de una pérdida de documentación por una falla en la custodia de los papeles, la noticia generó alarma ante la posibilidad de que algún grupo con intenciones de atentar contra Benedicto XVI hubiese podido acceder a la información.
Al margen de la alerta antiterrorista internacional, las fuerzas de seguridad están atentas a los movimientos de los grupos “antisistema” de Barcelona, que a través de redes sociales en Internet están preparando acciones para el domingo.
Una de las posibilidades que barajan es que estos grupos intenten quemar alguna Iglesia, según fuentes de seguridad. “La única iglesia que ilumina es la que arde”, podía leerse ayer en una gran pancarta en un acto antipapa celebrado en el centro de Barcelona.
Durante la visita del Papa las autoridades españolas decidieron mantener el alerta antiterrorista a nivel 2 -alto en una escala de 4-, pese a las recientes advertencias de Estados Unidos sobre la posibilidad de atentados en Europa así como la cartas bombas enviadas a dirigentes europeos y embajadas en Grecia.
El portavoz de la Policía Nacional hizo especial “hincapié” en el hecho que los papeles no recogen información sensible del operativo, que mantiene su nivel de seguridad, por lo que “no se cambiará el plan de seguridad de la visita del Papa”, precisó el portavoz.
“Una visita de este tipo requiere reuniones previas” y en ellas se producen “papeles con peticiones de personal, elementos, ordenadores, como sucede en cualquier documento interno”, añadió.
La fuente autorizada de la Policía Nacional precisó que los textos “no tienen ningún valor policial porque no consta en ellos información sensible que afecte a la seguridad del dispositivo, sino que detalla el programa previsto de los actos”, aparte de referencias personales como nombres o teléfonos. “La seguridad del Papa está totalmente garantizada”, concluyó.
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