Política

¿Quién paga la crisis?

Grieta entre las entidades del campo por las retenciones

Desde Carbap ven con buenos ojos un aumento de los derechos de exportación porque entienden que el esquema de retenciones fijas en pesos quedó desactualizado. Sus pares santafesinos de Carsfe lo rechazan de plano: “No toleraremos que se tome al campo como una caja de recaudación”


El presidente de Carbap Matías De Velazco

¿Qué hará el gobierno de Alberto Fernández con las retenciones? El presidente electo aún no definió quién conducirá el Ministerio de Agricultura, ni habló de sus políticas para el sector, aunque es un secreto a voces que necesitará mejorar la recaudación desde el primer día para atender las demandas sociales y la deuda que deja el gobierno de Mauricio Macri.

El esquema de retenciones de 4 pesos por dólar para las exportaciones primarias y de 3 pesos por dólar para los productos elaborados, lanzado en septiembre de 2018, quedó viejo. Y al interior de las entidades ruralistas ya empezó el debate: algunos dirigentes anticiparon que aceptarán un aumento o cambio de esquema; otros se oponen con firmeza y denuncian que es “un impuesto distorsivo” que ahuyenta las inversiones.

El presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Matías De Velazco, fue quien dio el puntapié inicial del debate al afirmar que no es momento de eliminar las retenciones, sino que deben aumentar porque –al estar fijas en pesos– quedaron retrasadas con las últimas devaluaciones.

“No lo vemos con agrado, pero entendemos la emergencia que está atravesando la Argentina y la cantidad de pobres que hay y pondremos el hombro”, señaló el ruralista en declaraciones al programa LN+ Campo.

“El campo no es egoísta y ya lo demostró. Cuando se originaron (las retenciones), en el gobierno de Duhalde, el campo puso el hombro. Cuando Macri las tuvo que reimplantar, el campo guardó silencio, apretó los dientes, bajó la cabeza y apoyó. Y ahora va a hacer lo mismo”.

No obstante, De Velazco aclaró que “tiene que ser una medida coyuntural y pensar en forma gradual, cuando asuma el nuevo gobierno, de forma planificada cómo empezar a desarticularlas. Pero en este momento no se va a pedir que se eliminen”.

No pasó desapercibido el detalle de que Carbap está haciendo lobby ante el gobierno electo para ubicar en el Ministerio de Agricultura de la Nación a un dirigente del sector, Dardo Chiesa, actual presidente de las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).

Rechazo santafesino

La Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe (Carsfe) emitió de inmediato un comunicado en contra de la idea de subir las retenciones, pero poniendo el énfasis en el gobierno entrante y no en los dichos del titular de la Carbap.

“Resulta doloroso que con la rapidez que se piensa en recaudar más, no se tenga el mismo interés en asistir a la producción cuando enfrenta las inclemencias climáticas, sequías, inundaciones, etc., como las que hemos sufrido, produciendo verdaderos desastres en nuestros campos y en las economías del interior provincial”, indicó Carsfé.

“Se estima que en los primeros seis meses de este año, a partir de la producción de los complejos de soja, girasol, maíz, trigo y biodiésel, la provincia de Santa Fe tributó una cifra superior a los 54 mil millones de pesos, cifra que se transfirió a las arcas nacionales y que empobreció a la economía cotidiana del interior provincial”.

Desde Carsfe indicaron que el sector agropecuario “se encuentra sumido en una profunda asfixia tributaria, tanto sea a nivel nacional, provincial y municipal y comunal y nos parece insensato continuar con la idea de las nuevas autoridades de seguir aumentando impuestos. Esperamos que se trate sólo de trascendidos”.

En tono de ultimátum, la entidad cierra su comunicado advirtiendo que “no toleraremos que se tome al campo como una caja de recaudación. Por lo tanto, pedimos que se aclare esta situación, ya que esta incertidumbre genera un mayor desaliento e incertidumbre, frenando las inversiones en un sector que anualmente es el que más invierte, genera y aporta riqueza para el país”.

“Las retenciones son ineficientes”

Al mismo tiempo, desde Cartez (Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona, que reúne a sociedades rurales de Córdoba y San Luis) le pidieron a sus pares de la Carbap “coherencia entre los discursos y las convicciones”.

Para la entidad de la Tercera Zona, las retenciones a las exportaciones son un “impuesto distorsivo que asfixia a las producciones que generan divisas para el país.

Un comunicado firmado por el presidente de Cartez, Gabriel De Reademaker, sostiene que “en la práctica, contrariamente a lo que se pregona, las retenciones a las exportaciones han demostrado ser completamente ineficientes como herramienta de remediación de la pobreza estructural que agobia ya a un 40% de los argentinos”.

Además, la entidad ruralista ratifica que no están “dispuestos a ceder a presiones que busquen hacernos renunciar a nuestros más elementales principios y convicciones” y postula que se debe pensar un sistema impositivo progresivo y equitativo, que contemple el resultado económico de las diferentes actividades, al tiempo que posibilite una reducción gradual de la presión fiscal que actualmente condiciona la actividad de las economías regionales.

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