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Grecia pidió ayuda

El primer ministro heleno solicitó que se active el rescate diseñado por la UE y el FMI para poder superar la grave crisis financiera. Alemania pone condiciones.

El primer ministro de Grecia, Giorgos Papandreu, pidió ayer activar el paquete de rescate diseñado por la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), por entre 40 y 45 mil millones de euros (entre 52 y 58 mil millones de dólares) para ayudar al país a superar la grave crisis financiera que atraviesa. Sin embargo, el pedido de auxilio tuvo una distinta respuesta por parte de los alemanes quienes exigieron que se apliquen férreas medidas.

“Tenemos por delante un camino difícil. Es imperativo que pidamos la activación del mecanismo. Ya he dado la instrucción pertinente al Ministerio de Finanzas”, dijo Papandreu desde la pequeña isla de Megisti en un discurso transmitido por televisión.

Con un discurso emotivo, Papandreu consideró que los griegos afrontan una “nueva Odisea” (en referencia al poema épico atribuido a Homero), aunque sostuvo: “Sabemos el camino hacia Ítaca”.

La Comisión Europea confirmó la solicitud griega y anunció que la tramitará por la vía rápida.

“Los análisis no durarán semanas, sino días”, dijo en Bruselas un portavoz del comisario de Economía, Olli Rehn, y agregó que “el mecanismo ahora avanza de forma automática”.

También el FMI confirmó la recepción: “Estamos dispuestos a actuar de inmediato”, aseguró en Washington el director gerente del organismo, Dominique Strauss Kahn. Por su parte, el portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, dijo: “Apoyamos el llamamiento a que se active (la ayuda)” y señaló que el Departamento del Tesoro está monitoreando la situación.

Papandreu subrayó: “A través del mecanismo de asistencia UE-FMI y gracias a la ayuda de nuestros socios europeos, se podrán ordenar las finanzas del país”, al borde de la bancarrota, y “construir una nueva Grecia”.

En tanto, las protestas populares contra las medidas de austeridad aplicadas por el gobierno continuaron ayer en Atenas, donde unas 2.500 personas se manifestaron por las calles centrales y algunos grupos fueron dispersados con gases lacrimógenos cerca de la sede de la UE.

Alemania, uno de los países más reacios al plan y su mayor contribuyente, reaccionó con advertencias acerca de que la ayuda se dará sólo “en caso de que sea totalmente necesario” y bajo “estrictas condiciones”.

Atenas tendrá que presentar “un plan de austeridad creíble”, advirtió la canciller Angela Merkel, tras conversar por teléfono con Papandreu.

Precisamente, Alemania asumirá la mayor parte del plan de rescate financiero diseñado por la UE y el FMI: de los 30 mil millones de euros que aportan los socios de la eurozona, Berlín pondrá 28 por ciento; Francia aportará 20 por ciento; Italia 18 por ciento; y España 12 por ciento. El resto será sufragado por otros once países europeos.

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