Aniversario

“Gracias por acompañar en nuestro pedido de justicia…”

La opinión de Luciana Escobar, hermana del joven Pichón Escobar.


LUCIANA ESCOBAR
Hermana de Gerardo Escobar

Soy Luciana, hermana de Pichón Escobar. El 14 de agosto de 2015 Pichón salió a bailar y no volvió más. Pasó una semana de búsqueda de parte de amigxs, familiares, compañerxs de laburo y de personas que no lo conocían pero también pedían por su aparición. Nos sorprendió el 21 de agosto la llamada de la fiscalía diciendo que había aparecido un cuerpo flotando en el río para que vayamos a la morgue a reconocer. Yo sin entender y con la esperanza de que no fuera él, entré apresurada a la habitación, donde ese instante al verlo y reconocerlo, una parte de mí moría y otra renacía. Me marcó para siempre y hoy lejos quedó la Luciana de ese entonces.

A dos años de llevar esta lucha adelante exigiendo justicia por él, comprendí que ya no sólo se trataba por mi hermano, sino por tantxs pibxs que pasaron por lo mismo, que fueron víctimas de una de las tantas fuerzas corruptas del Estado como es la Policía.

A dos años, la causa de mi hermano está paralizada, sin un juez quien la investigue, con 5 imputados (3 patovicas y 2 policías) en sus casas con sus familias y en mi familia falta un hermano, un hijo, un tío, un sobrino. A dos años su desaparición forzada para la Justicia no hay culpables, ni responsables. Diría que queda grande llamar a la Justicia de esa manera, le queda mejor “la injusticia que se tapa los ojos, la boca y los oídos”. A la Justicia la desaparecieron como a Pichón.

Es por eso que dejé el duelo de lado, no tenía tiempo para llorar y salí a hacerle frente a esta injusticia. Salgo a exigir que dejen de matar a nuestrxs pibxs, porque no queremos ni una foto más de ellxs en las remeras. Lxs queremxs vivos.

Salgo a exigir al Estado que se haga cargo porque esto ya no se trata de violencia institucional sino de Represión Estatal. Acá estamos los familiares en las calles, caminando, reclamando justicia por lxs pibxs, seguimxs transformando el dolor en lucha, y comprobando que la única justicia que encontramos es la popular.

Feliz año a El Ciudadano, gracias por contar y plasmar las historias de cada lucha… Gracias por acompañar en nuestro pedido de justicia…

Arriba los que luchan