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Pueblo Esther

Golpe comando y un botín que no cubrió ni los viáticos

Una pareja vivió una pesadilla tras ser sorprendida por encapuchados armados que se llevaron 3 mil pesos.


“O le erraron al objetivo o fue al azar”. Con ese dilema intentó explicar un alto jefe policial el golpe comando que ayer a la madrugada llevaron a cabo seis encapuchados armados dentro de un country naútico de Pueblo Esther. Es que el sexteto logró burlar a dos custodios privados, ingresar a un domicilio, maniatar a una pareja y huir sin dejar rastros, todo por un magro botín de tres mil pesos. Hace tres meses, otro golpe en un barrio privado de la misma localidad terminó con tres familias asaltadas y reprodujo robos que durante el año se sucedieron en vecindarios cerrados de Ibarlucea, Funes, Roldán, Zavalla y Rosario.

Un hombre de 62 años y su pareja vivieron una verdadera pesadilla anteayer tras ser sorprendidos en mitad de la noche mientras dormían. Según voceros policiales, alrededor de las tres unos seis hombres que vestían ropas oscuras y tenían los rostros tapados los despertaron y los maniataron. “Entraron a robar sin precintos plásticos, utilizaron corbatas y lo que encontraron a mano para atarlos”, aseguró.

Pero como la pareja no tenía mucho dinero, ni siquiera vivía en el lugar ya que Oscar C. tiene domicilio en Rosario y su pareja en un pueblo cercano, los billetes apenas sumaban tres mil pesos. Eso molestó a los ladrones, que golpearon tanto al hombre como a la mujer para que confiesen dónde tenían más dinero. Finalmente se tuvieron que conformar con el magro botín que completaron con algunos objetos de valor, como los anillos que llevaban las víctimas.

El violento robo tuvo lugar en el barrio privado La Bahía, un country náutico ubicado en 27 de Febrero al 300 de Pueblo Esther, casi en el límite con Arroyo Seco, donde tiene jurisdicción la subcomisaría 15ª.

Uno de los investigadores dijo que todavía no se explica cómo lograron burlar la seguridad del barrio privado ya que “los custodios ni se enteraron”. En ese sentido, especuló que podrían tener un conocido en el vecindario o haberse hecho pasar por habitantes del lugar. “En las cámaras de seguridad del country se ve muy poco, tenían los rostros cubiertos y estaba oscuro. Pedimos los registros de la Municipalidad de Pueblo Esther para esclarecer en qué vehiculo se movilizaban”, dijo un pesquisa.

En relación a la banda que dio el golpe comando, un alto jefe policial se mostró sorprendido. Es que además de armas y handy con frecuencia policial, los ladrones actuaron con inteligencia previa, pero el botín no les alcanzó ni para cubrir los gastos. Al respecto dijo que podrían haberse equivocado de lugar o no haber contado con la inteligencia suficiente para llevar a cabo semejante operativo por tan poco dinero: “O le erraron al objetivo o fue al azar”, concluyó.

Cerrados y violentos

El hecho anterior más cercano perpetrado en un barrio privado fue a fines de octubre en el country La Antonella, ubicado en el kilómetro 377 de la ruta nacional 33, en el ingreso a la localidad de Zavalla. Allí una familia fue víctima de al menos cuatro asaltantes armados que irrumpieron en su vivienda de madrugada y huyeron del lugar con celulares, electrodomésticos, alhajas, un drone, 16 mil pesos y 150 dólares. Los pesquisas indicaron que se investiga cómo la banda ingresó al predio, debido a que el custodio que está en el ingreso principal no advirtió movimientos sospechosos.

A comienzos de agosto, ocho hombres armados desvalijaron tres viviendas en el country Sol Paraná de Pueblo Esther, ubicado sobre el kilómetro 3 de la ruta A012. La banda ingresó cortando un alambrado en un sector donde la alarma no funcionaba, redujo a los dueños de dos casas e ingresó a modo de escruche en una tercera, para fugarse con un botín de unos 50 mil pesos y joyas.

El antecedente inmediato fue la noche del 22 de julio, cuando cuatro hombres armados saquearon una casa del barrio cerrado rosarino Carlos Pellegrini, en Fisherton. Tras reducir y golpear a la familia de un empresario, huyeron con joyas, dinero y un auto de la víctima. Ese robo pasó casi 48 horas después de que un grupo comando ingresara por la madrugada en el country Los Álamos, sobre la ruta nacional 34, en Ibarlucea. Estaban armados y desvalijaron tres viviendas donde se hicieron con unos 100 mil pesos en joyas y 16 mil en efectivo y un vehículo. El año arrancó con un robo en Kentucky, un barrio privado de Funes, donde entraron desconocidos cuando la familia no estaba y se llevaron dinero, joyas y el auto familiar.

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