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Fuga: se escaparon 14 presos de la seccional 12ª

Siete reos fueron recapturados después de que vecinos de la zona los escucharan correr por los techos.

Como si se tratase de una especie de deja vu, 14 presos que estaban privados de su libertad en el penal de la comisaría 12ª de barrio Ludueña escaparon de sus celdas, tal y como ocurriera hace casi un año en la misma seccional. Sin embargo, esta vez los reos no debieron limar barrotes ni valerse de un boquete en la pared para ganar la calle, ya que habrían contado con ayuda externa que les abrió los candados que les impedían salir. Tras el hecho fueron recapturados siete de los evadidos, quienes intentaban huir del lugar por los techos de las viviendas vecinas. De acuerdo con los voceros, el subjefe de la seccional y cuatro efectivos que estaban trabajando en el momento de la fuga fueron desplazados de sus cargos.

Según informaron altas fuentes de las investigación, ayer a las 10.45, 14 de los 15 presos que se encontraban alojados en el penal de la comisaría 12ª de barrio Ludueña, en la zona oeste de la ciudad, se fugaron.

“Uno se quedó durmiendo. No sabemos si no se quiso ir o si no se dio cuenta de los que pasaba”, expresó un vocero.

De acuerdo con los pesquisas, para que la fuga se concretara, los reos tienen que haber contado con ayuda externa. Es que en la evasión de ayer no hubo rejas limadas, no hubo barrotes removidos ni boquetes en las paredes –tal y como ocurriera en la fuga que tuvo lugar hace casi un año en la misma seccional–; sino que algunos candados que cerraban puertas fueron abiertos.

Fuentes de la investigación explicaron que, luego de notar que los presos –cuyas identidades no trascendieron– habían abandonado el penal, en la comisaría comenzaron a recibir llamados de vecinos de la manzana de la seccional, ubicada en Pedro Lino Funes 255 bis, quienes decían que había personas corriendo por los techos.

En ese contexto se pidieron refuerzos a otras reparticiones policiales y se consiguió recapturar a siete de los 14 evadidos, explicó un pesquisa.

Según los uniformados, estos sujetos, que en su mayoría están detenidos por delitos de robo, fueron transferidos a distintas seccionales, donde quedaron alojados a disposición del Juzgado Correccional en turno.

Fuentes de la Unidad Regional II informaron que, tras la fuga, Raúl Oscar Romero, subjefe de la seccional 12ª –quien se encontraba a cargo de la repartición ya que el jefe, Baltazar Machado, se encuentra de licencia– fue desplazado de su cargo, al igual que los otros cuatro efectivos que se encontraban trabajando en el lugar.

Hasta tanto se resuelva la investigación del hecho, la seccional quedó a cargo de Gustavo Scheffer, señalaron los voceros.

A un año de otra fuga

El 24 de enero de 2010, once hombres que estaban alojados en la misma seccional huyeron del penal después de realizar un boquete en la pared de la celda.

El hecho se registró cerca de las 15.40, cuando el personal de la comisaría ingresó a realizar un recuento de presos y se encontró sólo a 11 de los 23 que realmente debía haber allí.

Los 12 restantes habían doblado una reja y realizado un boquete de 30 por 40 centímetros, por donde salieron y ganaron los techos para luego descolgarse hacia calle Rouillón.

El primero de los recapturados ni siquiera consiguió abandonar el predio de la seccional: unos kilitos de más hicieron que quedara trabado en el boquete, por lo que enseguida fue detenido.

Tras la fuga desde la Policía se dispuso el pase a disponibilidad de los tres policías que se encontraban en la dependencia y del subjefe de la misma.

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