El Hincha

Lamentable

Fuerte repudio por arenga machista del preparador físico Atlético Güemes de Santiago del Estero

Previo al duelo con Villa Mitre de Bahía Blanca en el Torneo Federal A, Diego Kofler, reunió a los jugadores y empleó la figura de una mujer para “motivarlos. Mirá el video


Güemes de Santiago del Estero jugó este lunes la final del Torneo Federal A contra Villa Mitre de Bahía Blanca y consiguió el ascenso al Nacional B al ganar por penales. El suceso pasó casi a segundo plano cuando se conoció la arenga machista del preparador físico Diego Kofler a los jugadores.

“Es hoy. Hasta hoy Güemes se venía culeando a la negrita del pueblo, esa que se la culean todos. La que tiene olor a pingo. Y acá tengo una rubia, se llama Nacional B. ¡A esa la voy a buscar! ¡A esa me la quiero culear! Entonces tengo que romperme el orto para culearme esa mina. Tengo que ser decidido, tengo que ser inteligente. Tengo que romperme el orto y dejar la vida acá”.

“El partido que viene no importa, es hoy muchachos. Laburo, entreno, me rompo el orto. Frío, calor, lluvia, estoy acá. Pero por eso soy el mejor, porque estoy acá. Pero lo tengo que demostrar ahí adentro, en esa canchita. Me cansé de culearme a esa mina del Federal C, del Federal B, del Federal A. Me cansé, me quiero culear esa mina que me la voy a culear yo solo. ¡Yo solo voy a ser el primero que me la voy a culear! Depende mí”, concluyó en la reunión de equipo para alentar a los jugadores a su manera.

Un antecedente lamentable en el equipo

En agosto de 2019, Pablo Martel, quien por aquel entonces era el entrenador de Atlético Güemes, fue denunciado por violencia de género y amenazas por su esposa y, tiempo después, condenado a un año de prisión en suspenso en un juicio abreviado.

Martel se presentó ante la Justicia y admitió que la versión de su mujer era verdadera. Fue condenado a un año de prisión en suspenso. “Al tratarse de una pena menor, el delito se toma como excarcelable y el entrenador quedó en libertad horas después”, publicó Diario Panorama. Luego no pudo entrar el domicilio donde vivía con ella y tuvo que cumplir con otras restricciones.

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