Ciudad

Fonavi: reclaman escriturar viviendas

Vecinos de esos barrios piden los títulos que los convierten en propietarios.

Por: Paola Cándido

Un grupo de vecinos de los barrios Fonavi de Rosario decidió organizarse para plantear de manera conjunta los problemas que padecen, especialmente con lo relacionado a las dificultades que suelen tener para escriturar sus propiedades y los problemas en la higiene urbana que suelen padecer cotidianamente en esos vecindarios. “Decidimos juntarnos para empezar con los reclamos de la escrituración de nuestras viviendas y que nos puedan dar una solución lo antes posible”, contó a El Ciudadano Oscar Fernández, uno de los integrantes del Movimiento Barrios Fonavi de Rosario (Mobaforo). Al respecto, desde la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo dijeron que se está trabajando el tema aunque muchas veces los trámites son lentos porque “la irregularidad en la tenencia y en los planos de los edificios suele ser muy grande”.

Si bien la ley 12.953 de titularización de viviendas sociales posibilita la entrega de la escritura a las familias que habitan en los distintos complejos habitacionales en territorio santafesino, Fernández remarcó que “pasa el tiempo y la tarea no se hace o lo poco que se hace, se hace mal y se está quebrantando el espíritu de la ley”. “El artículo 2 dispone que la vivienda sea entregada como bien de familia y la entregan como hipoteca. La Dirección Provincial de Vivienda está haciendo todo a su conveniencia. La ley establece que siempre se tiene que actuar en beneficio de los adjudicatarios, cosa que en estos casos sucede todo lo contrario de lo que dice la ley”, subrayó.

Más adelante, el integrante de Mobaforo remarcó: “Resolvimos mandar una copia a la Comisión Bicameral, que está integrada por cuatro senadores y cuatro diputados y todavía no han actuado. La ley establece que la cuota no podrá superar el 15 por ciento del sueldo familiar y tiene que ser menor al 5 por ciento del salario mínimo, vital y móvil. Si aumentan la cuota es un disparate, porque la misma era de 50 pesos y hasta finalizar el pago total de la vivienda, siempre tiene que salir beneficiado el adjudicatario”.

Además, el representante de los vecinos de barrios Fonavi destacó que “con el tema de la cuota, la Dirección de Vivienda está haciendo un negocio comercial porque quiere cobrar la cuota actualizada como si fuera nueva y yo, por ejemplo, estoy viviendo en este departamento que ya tiene 29 años”.

Otra de las preocupaciones que manifestó Fernández, es que la Dirección de Vivienda tiene que controlar un consorcio y todavía no establecieron ningún lugar de referencia para eso. “La mayoría de la gente está muy preocupada porque no se hace lo que corresponde”, apuntó.

Fernández aclaró que comenzaron con esta iniciativa impulsados en un comienzo para obtener la escrituración de las viviendas. “Soy del barrio La Carne, de calle Laprida al 6200, y pretendemos seguir con este movimiento hasta que respondan a todos nuestros reclamos. Ya fuimos al Ministerio de Obras Públicas y a la Defensoría del Pueblo. El problema es serio y muy grave”, insistió.

“Los funcionarios salen a decir en los medios que está todo bien, salen a justificar lo injustificable. Vamos a dar todos los pasos necesarios para modificar todo esto que es importante y sobre lo que nadie se ocupa. Queremos cambiar esta realidad. Los interesados que quieran sumarse, pueden hacerlo a partir del lunes 4 de abril desde las 17, en Rioja 1065, primer piso”, indicó.

Desde Vivienda

Por su parte, la titular de la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo, Alicia Pino, explicó que “hay que implementar una unidad ejecutora que se dedique exclusivamente al programa de escrituración que organiza las tareas a través de convenios con municipios y comunas”.

“El municipio de Rosario  fue uno de los primeros en adherir a este programa de titularización. Los legajos reciben la documentación  y se preparan en los distritos y la llevan a la unidad central de la unidad ejecutora, donde a través del área notarial de la Dirección Provincial de Vivienda y el convenio del colegio de escribanos se van haciendo las escrituras”, añadió.

“El trabajo es lento porque la irregularidad en la tenencia y en los planos de los edificios que no están presentados es muy grande, entonces es un trabajo lento porque esto termina siendo lo definitivo. Se está trabajando con el Colegio de Agrimensores también. El trabajo de escrituración no es sólo hacer la escritura ya que en muchos casos es regularizar la transferencia del título original, hacer la mensura, regularizar los planos edilicios y finalmente poder tener el título de escritura”, concluyó.

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