Un rugbier rosarino de la primera división de Jockey Club fue acusado por su novia de golpearla luego de que se viralizara un video que ella filmó mientras el deportista la pegaba. Una fuente vinculada al club de Fisherton confirmó los trascendidos del fin de semana. La denuncia fue hecha por la mujer hace al menos dos semanas, pero recién fue confirmada por los voceros del Ministerio Público de la Acusación cuando el video llegó a las redes sociales. Según explicaron los investigadores, la víctima fue entrevistada el miércoles 28 de febrero en la Unidad de Violencia contra la Mujer. Le tomaron declaración y aportó datos que los investigadores mantienen en reserva. También le tomaron declaración a su madre.
Imágenes
En el video que acompañó la denuncia se ve a un hombre al que distintos posteos de Facebook y Twitter señalaron como Martín O. Se lo ve desnudo y golpeando a una mujer en una habitación. Ella le pregunta llorando: “¿Qué te hice? ¿Por qué borraste las conversaciones con ella? ¿Yo qué te hice? ¿Cómo me vas pegar así?”. Él responde: “¡Tomátelas. Tomátelas de acá. No te quiero ver nunca más!”.
Más redes
La mujer publicó una foto en Instagram donde mostró un hematoma en su oreja izquierda. Más de un usuario de la red social repudió el hecho. “El club analiza los pasos a seguir con el jugador. Podría ser suspendido”, anticipó este domingo a la agencia Télam una fuente allegada a la institución verdiblanca.
En la investigación interviene la fiscal María Teresa Granato que ordenó tomar testimonios a testigos que ofreció la denunciante. “Al momento de presentarse en Fiscalía las lesiones manifestadas en la denuncia no eran constatables por parte de médicos forenses por lo que la Fiscal ordena nuevos exámenes médicos y relevamiento médico forense de fotografías de las lesiones aportadas por la víctima y pericia sobre video del hecho aportado”, destacaron desde Fiscalía.
El rugbier acusado no cuenta con antecedentes penales. Sin embargo, entre las denuncias por redes sociales lo asocian a otros hechos de violencia. El hombre también cosechó apoyo. Amigos y otros usuarios salieron a justificar la violencia y trataron a la víctima de oportunista. Incluso cuestionaron la difusión del video por ser “intimo”.
