Fin de un ciclo: ¡Andate Sampaoli!

Ya está. Se terminó el sueño mundialista. Duró lo que tenía que durar. Ni más ni menos. Imposible extender un proyecto si no se apoya sobre bases sólidas. Y Argentina, a través de una generación de futbolistas golpeados por los tres subcampeonatos, por los cambios estructurales y por los despropósitos de AFA, había entrado por la ventana a Rusia 2018, al cabo de una Eliminatoria con más contratiempos que alegrías.

Francia fue superior en todo. En estructura táctica, en jerarquía individual y en proyecto futbolístico. Sabe a lo que juega y cuando aceleró a fondo, metió tres goles y liquidó la historia. Y Argentina, puro corazón, ni por asomo pudo desplegar el fútbol del primer tiempo contra Nigeria. Un pelotazo de Di María y una pelota parada en el gol de Mercado lo mantuvieron en partido.

No alcanzó con tener al jugador extraordinario de la actualidad. No hubo proyecto que contuviese al genio de Messi. Y en el último de los despropósitos, sólo una mente perversa como la de Sampaoli podía cranear de poner a Messi de doble nueve. Aislado allá arriba para que se lo morfen Varane, Umtiti y compañía.

Fin de ciclo para muchos. Adiós a la generación subcampeona en Brasil 2014. Ojalá que también haya sido el final de la desdichada aventura de Sampaoli por la selección, para darle lugar al comienzo de un proyecto serio en AFA. Dificilísimo.