El saldo que dejó la noche de Año nuevo fue de 18 personas heridas por armas blancas y de fuego en distintas contiendas, y dos niños que debieron ser atendidos por lesiones leves debido al uso de pirotecnia.
Los datos fueron suministrados a la prensa por el secretario de Salud Municipal Leonardo Caruana quien además evaluó que hubo una merma de heridos con armas en relación al año anterior.
“Los heridos por armas de fuego bajaron de 16 a 12, y por arma blanca de 10 a 6”, señaló el funcionario.
Ataques desde motos
En la madrugada de este 1º de enero tres personas resultaron heridas de bala por disparos efectuados desde motos: dos de ellas, en el mismo lugar, Avellaneda y Uriburu, pero en diferentes hechos. El otro caso ocurrió en Seguí y La Haya.
En el primero de los sucesos, un joven de 22 años ingresó al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez poco después de la 1.30 con heridas de arma de fuego en abdomen, tórax y piernas. La víctima pudo dar su testimonio: fue agredido en Avellaneda y Uriburu con disparos reiterados por el conductor de una moto sin que mediara entre ambos un altercado previo. El hombre fue asistido inicialmente en el Hospital Carrasco y de allí derivado al Heca, siendo su estado de salud reservado.
Tres horas después, en la misma esquina, un joven de 20 años fue agredido a balazos también desde una moto. Lo trasladaron al Hospital Carrasco y los médicos también calificaron su estado de salud como reservado.
El tercer hecho de agresión con arma de fuego sucedió poco después de las 4 de esta madrugada en bulevar Seguí y La Haya. La víctima, de 20 años, ingresó por sus propios medios al Heca y allí relató que dos hombres le dispararon desde una moto sin que mediara un conflicto entre el joven y sus atacantes. En este caso, la víctima permanece internada en observación, sin compromiso de su vida.
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