Marcos De Carlo
La intendenta de Rosario y candidata a senadora provincial Mónica Fein poco más de las 10 enfrentó los micrófonos en el bunker del Frente Progresista en el hotel Ariston para destacar el “triunfo” de la coalición tanto en la ciudad de Rosario como de la provincia, con un caudal de 35% de votos en la ciudad.
En ese sentido, Fein destacó que hay una tendencia “irreversible” que marca que Antonio Bonfatti es el candidato a gobernador más votado en la provincia, al igual que la lista a diputados que lidera Miguel Lifschitz y su propia candidatura a senadora departamental.
Una mención aparte mereció la categoría de intendente. En primer lugar destacó que la sumatoria de los votos de la socialista Verónica Irizar y Pablo Javkin depositaron al Frente Progresista en el primer lugar. En tanto que pidió esperar hasta el final, ya que hay una elección muy reñida, para saber quién se queda con la nominación a intendente para las generales del 16 de junio. “Cautela” fue la palabra que utilizó Fein para saber finalmente quién triunfa en la interna de la coalición oficialista.
Para Fein, con el 50% de las mesas testigo, hay un “empate técnico” entre Irizar y Javkin. “Queremos ser muy prudentes y hay que esperar”, dijo y solicitó no adelantarse, en referencia al bunker rival donde María Eugenia Schmuck habló de un triunfo del ex dirigente del ARI. “Es muy parejo el resultado, hay que esperar”, expresó.
La actual intendenta “agradeció” a los rosarinos por acompañar al Frente Progresista. Consideró que hay una buena evaluación de la gestión y de los candidatos. “Los rosarinos quieren que el Frente Progresista siga gobernando, ese es el mensaje que nos dan. Cuando tengamos el 100% de las mesas escrutadas vamos a transmitir el resultado como hemos hecho siempre”, agregó.
“Para nosotros es muy importante que Bonfatti es el candidato más votado y comienza otra etapa para ir a las elecciones generales”, finalizó.
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