El empleado bancario de 52 años baleado hace dos semanas frente a un minimarket de Montevideo al 4400, falleció ayer minutos después del mediodía en la sala de terapia intensiva del Heca. La noche del 27 de mayo pasado, la víctima fatal resultó herida cuando desconocidos que pasaron a bordo de un automóvil abrieron una lluvia de balas contra el local comercial. Para la Policía, el ataque iba dirigido al negocio. Sin embargo, la propietaria del local negó esa versión.
“El fallecido, identificado como Raúl Alberto Plotkin, de 52 años, era empleado bancario y vivía a pocos metros del local. En todo este tiempo nunca superó el gravísimo cuadro en el que quedó luego de que le extrajeran el plomo del abdomen. Plotkin estuvo en terapia intensiva hasta hoy (por ayer) a las 12.15 cuando se descompensó y murió. Nunca se despertó para poder contar lo que vio”, señaló una fuente.
El hecho ocurrió cerca de las 20.30 del domingo 27 de mayo cuando desconocidos a bordo de un vehículo que no fue identificado realizaron cuatro disparos contra un minimarket de Montevideo y Servando Bayo. “Uno de los proyectiles calibre 38 impactó en la zona intercostal a la altura del abdomen de la víctima fatal”, indicó un pesquisa.
Vecinos de la cuadra dialogaron con El Ciudadano un día después del ataque y aseguraron que la mayoría se enteró de lo que había pasado por terceros. “Una vecina comentó que el herido se cruzó a comprar una cerveza y cuando salía lo balearon. Pasó un auto rápido por Servando Bayo, dobló con todo y disparó. El hombre justo salía y lo agarró. Dicen que bajó la ventanilla y tiró como venía”, reconstruyeron algunas personas.
Los uniformados detallaron que lo que estaba comprobado al cierre de esta edición era que el ataque no estaba destinado contra el fallecido y que no se trató de un intento de robo y explicaron que además de las cuatro detonaciones contra el frente, los agresores hicieron un disparo a tres casas del negocio que impactó cerca del tanque de combustible de un Fiat Uno. A la altura de donde estaba el Fiat, vive la dueña del minimarket. “Esto hace suponer que la agresión estaba destinada contra los dueños del local, aunque la propietaria –quien atiende junto a sus dos hijos– dice que no tuvo problemas con nadie”, resaltaron.
“Algunas personas sostienen que los autores de los tiros iban en un Renault 12 y otras aseguran que las tiros salieron de un auto gris nuevo”, describieron los voceros, quienes aclararon que buscan testigos que hayan presenciado el confuso hecho.
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