Éxodo masivo y nuevo escenario internacional para el rugby argentino, ¿beneficiará a Los Pumas?

Se viene un cambio de paradigma en el rugby argentino. Hasta este año, la plataforma para llegar a Los Pumas eran los Jaguares. Salvo algunas excepciones, el seleccionado nacional se nutría de los jugadores con los que contaba la franquicia argentina en el Súper Rugby. Ante la imposibilidad de llevar adelante la principal competencia en el Hemisferio Sur con un equipo propio, los mejores jugadores optaron por emigrar para mantener su nivel en el Viejo Continente y Oceanía.

La UAR anticipándose a la merma en los ingresos económicos al no disputarse el Súper Rugby en 2021, decidió que aquellos jugadores que tuviesen ofertas del exterior podrían aceptarlas y que no se implementaría la clausula de rescisión, pero como toda implicancia económica también tiene una letra chica.

¿Hay inconsistencias en el accionar de la Unión? Al parecer sí. Al cordobés Santiago Carreras, con vínculo hasta el 2023, le negaron la salida a Leicester de Inglaterra y le prometieron que iba a tener competencia. Un contrato que para el  polifuncional back hubiese sido muy importante en su carrera, ya que los Tigers es un club que forma jugadores y apuesta a los proyectos.

Ahora bien, sacando a Tomás Cubelli y Julián Montoya con contratos altos y hasta 2021, el resto son todos jóvenes a los que les podría haber cabido la misma negativa que le aplicaron al cordobés: Bautista Delguy y Tomás Lezana (2021), Domingo Miotti y Lucas Paulos (2022) y Santiago Medrano (2023).

A esta altura la incongruencia en la toma de decisiones no causa sorpresa, pese a que no se entiende por qué a unos jugadores se los libera y a otros no. Incluso desde el staff técnico se les aconseja a los jugadores que opten por clubes en los que puedan tener continuidad.

En esa línea, el nuevo destino de cinco argentinos es Western Force: franquicia de la que es propietario el australiano Andrew Forrest (titular de Fortescue Metals Group), quien tiene inversiones en San Juan para extraer cobre y que semanas atrás participó de una reunión virtual con el presidente Alberto Fernández, junto al titular de la minera en América del Sur, Agustín Pichot.

Ante el silencio de la UAR por los nuevos movimientos de jugadores al exterior, hace ruido que le hayan negado a algunos players la posibilidad de progresar, tanto rugbística como económicamente.

Por supuesto, que esas oportunidades –en Australia- son más que bienvenidas, porque son apuestas a valores locales para que puedan seguir compitiendo en el más alto nivel, ya que estarán jugando el Súper Rugby australiano y luego tendrán una competencia con las franquicias neozelandesas.

Hasta el momento, el éxodo argentino al Viejo Continente al día de hoy: Lucas Mensa (Valense, Francia), Guido Petti (Bordeaux, Francia), Marcos Kremer (Stade Français, Francia), Jerónimo de la Fuente (Perpignan, Francia), Matías Alemanno (Gloucester, Inglaterra), Matías Orlando (NewCastle, Inglaterra), Joaquín Díaz Bonilla y Matías Moroni (Leicester, Inglaterra), Agustín Creevy (London Irish, Inglaterra), Lucas Paulos (Brive, Francia) y Bautista Delguy (Bordeaux, Francia). Además, del entrenador Gonzalo Quesada a Stade Français de Francia.

Asimismo, al Hemisferio Sur partieron: Tomás Cubelli, Julián Montoya, Domingo Miotti, Tomás Lezana y Santiago Medrano (Western Force, Australia). Mientras que es muy fuerte el rumor de que Santiago Chocobares, con contrato hasta el 31 de diciembre de 2020, seguiría su carrera en Blues, la franquicia de Auckland. Según trascendidos sería anunciado en los próximos días.

Del plantel de Los Pumas, que tuvieron un paso de Jaguares, que todavía no emigraron y que tienen contrato con la Unión Argentina son: vínculos que vencen el 31 de diciembre de 2020: Ignacio Calas y Francisco Gorrissen. El resto de los que también finalizaban sus contratos, el 31 de diciembre próximo, ya partieron al exterior.

En 2021 expiran los vínculos contractuales de Gonzalo Bertranou, Emiliano Boffelli, Nahuel Tetaz Chaparro, Sebastián Cancelliere, Felipe Ezcurra, Juan Cruz Mallía, Joel Sclavi, Santiago Socino y Juan Pablo Zeiss. En un año más tarde finalizan los contratos de Rodrigo Bruni, Javier Díaz, Santiago Grondona, Javier Ortega Desio  y Lucio Sordoni.

Por último, en 2023 terminarán los acuerdos de Mateo Carreras, Santiago Carreras, Juan Bautista Pedemonte y Mayco Vivas. Y sin contrato se encuentra el apertura tucumano Tomás Albornoz, quien de quedarse en Argentina tendría muchas chances de ser el diez titular de Jaguares en la Súper Liga Americana, ya que Díaz Bonilla y Miotti, ya partieron y dejaron el puesto vacante.

En tanto, el sanjuanino Juan Pablo Castro, que formó parte del plantel actual de Jaguares, tampoco tiene vínculo con la UAR, disputó un partido con Ceibos, apostaría a quedarse y ganarse un lugar desde la estructura de la UAR y la consideración del staff técnico del seleccionado.

Hoy el panorama es este pero todo puede pasar. Los jugadores que sueñan con llegar al Mundial de Francia en el  2023, deberán estar en una competencia de nivel y para ello será vital sumar minutos de juego. Sin dudas, un cambio de paradigma para nuestro rugby. ¿Beneficiará a Los Pumas?