Casi doce millones de europeos de etnia gitana permanecen al margen de los mínimos derechos sociales en la Unión Europea (UE), cuyas autoridades propusieron hoy en Bruselas un paquete de medidas para garantizarles una vida digna.
La Comisión Europea planteó que parte de los recursos económicos necesarios para reintegrar a estos gitanos a la sociedad provenga de los Fondos Estructurales de la UE, incluido el Fondo Social (FS), un instrumento que fomenta, entre otros objetivos, la integración social de los ciudadanos.
Los gitanos representan, según Bruselas, la minoría étnica más numerosa de la Unión Europea y por número podrían equipararse, por ejemplo, a la población de Grecia o Bélgica, difundió la agencia de noticias DPA.
El Ejecutivo de los 27 socios comunitarios expresó preocupación por lo que considera “fuerte discriminación” que se ejerce sobre la etnia gitana en Europa.
En opinión de Bruselas, se produce una suerte de “apartheid” encubierto de los gitanos, en referencia a la política de segregación racial que imperó durante décadas en Sudáfrica.
“Queremos lograr que los gitanos sean aceptados como iguales y que se integren en la sociedad”, afirmó en Bruselas el comisario de Empleo y Asuntos Sociales, Laszlo Andor.
“Los esfuerzos por integrar a los gitanos deben abarcar un ciclo de vida completo, desde las primeras fases del jardín de infancia hasta la educación para los niños, los empleos para los adultos y la asistencia para los mayores de carácter no segregado”, porque esas comunidades “forman parte integrante de nuestra lucha contra la pobreza y el desempleo”, explicó.
Los Fondos Estructurales de la UE, que entre otros objetivos persiguen reducir las diferencias sociales entre los ciudadanos europeos, cuentan con un presupuesto de 350.000 millones de euros (unos 420.000 millones de dólares) para el período 2007-2013, que cubren las Perspectivas Financieras (presupuesto plurianual).
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