Marcos De Carlo
“Estamos reinventando el peronismo porque creemos que esta experiencia kirchnerista nos vació de contenido, lo transformó en una cáscara sin ideas y la gente quiere que el peronismo recupere los mejores valores y abandone los errores de los últimos años, que son muchos”, dijo el gobernador de Córdoba, José Manuel De la Sota, en su paso por Rosario.
El mandatario provincial visitó la ciudad para reunirse con dirigentes políticos de la región ante las próximas elecciones nacionales y apoyó la candidatura de Osvaldo Salomón como diputado nacional.
El cordobés, en diálogo con la prensa, manifestó: “Para nosotros reinventar el peronismo es crear un espacio para devolverle al peronismo un contenido social, pacificador, democrático, respetuoso de las otras ideas. Y en eso estamos con Osvaldo Salomón en Santa Fe, como yo trataré en Córdoba, (Francisco) De Narváez en Buenos Aires, (Roberto) Lavagna en Capital Federal, (Jorge) Busti en Entre Ríos. Ofrecerles una propuesta superadora de esta etapa crecientemente autoritaria que vive el país”.
—¿Sólo el peronismo o en ese armado puede entrar el PRO de Mauricio Macri?
—Primero tenemos que empezar por nuestra casa, somos peronistas. A mí me preguntan si soy peronista disidente. No, yo no disiento en nada, yo soy peronista del mejor (Juan Domingo) Perón, del Perón que vino a unir la Argentina. Yo soy seguidor de ese Perón, entonces no tengo que poner ningún aditamento a mi peronismo. Después, el peronismo siempre ha sido abierto y frentista. Yo lo defino sosteniendo que nosotros a la gente no le preguntamos de dónde viene, sólo le pedimos que estén de acuerdo a dónde vamos. El aspecto herencia que nos dejan los Kirchner es la división social que hay hoy en la Argentina. Y el próximo gobierno tiene que hacerse cargo de reunificar el país, sin dar un paso atrás en la política de derechos humanos, dando un paso adelante condenando también a los asesinos de (José Ignacio) Rucci. Sin dar un paso atrás en políticas sociales activas como la Asignación Universal por Hijo que compartimos y creemos que es buena. Es decir, sin retroceder en las cosas buenas que hicieron pero cambiando las cosas malas que están haciendo hoy que son más que las buenas.
—Luego del conflicto con camioneros en Córdoba, ¿cómo está la relación con Hugo Moyano en este incipiente armado?
—Hugo tiene que defender a su gente y su primera responsabilidad es ser dirigente sindical. Mi primera responsabilidad es garantizar la paz pública y el orden en mi provincia. Si llega a haber una colisión de intereses, que no la habido a punto tal que en este momento no hay ningún conflicto, pero si la llegara a haber lo primero que haremos es hablarlo. Creo que siempre vamos a encontrar un margen de respeto y negociación. Aunque no hubiera la posibilidad de ponernos de acuerdo eso no significa que políticamente no lo estemos. Una cosa son las demandas gremiales y los conflictos que se puedan dar en el ámbito del trabajo y otra cosa es la coincidencia política.
Preguntado sobre si lo esperan a Daniel Scioli para armar listas electorales, De la Sota señaló: “Él declama su lealtad al proyecto de la presidenta (Cristina Kirchner) de manera permanente. Creo que Scioli es el kirchnerista más dialoguista, más simpático, pero no se atreve a dar el paso de dejar atrás un gobierno que está en su final”.
Con respecto a si en el PJ este movimiento de figuras políticas se ve como un final de un ciclo, el cordobés afirmó: “Hay algunos que por necesidad o convicción siguen aferrados a eso. Pero en general hay una tradición: el peronismo te acompaña hasta la puerta del cementerio”.
Sospechas y renuncia
Ayer se conoció la renuncia de Ramón Sánchez, el titular de la empresa vial estatal cordobesa Caminos de las Sierras. El programa ADN de canal 10 emitirá hoy una cámara oculta que lo expondría cobrando coimas a empleados. De la Sota indicó: “No sabemos ni qué dice la cámara oculta. pero en mi gobierno todo funcionario que es acusado de cualquier hecho tiene la obligación de presentar la renuncia y de ponerse a disposición de la Justicia. Si la Justicia después dice que no tiene nada que ver, volverá a su cargo y sino se va a su casa o a la cárcel”.
“Sánchez jura que no tiene absolutamente nada que ver. Que lo que hay es una filmación de un pedido de colaboración a un empleado para pagar el alquiler de una sede partidaria en el barrio donde ellos trabajan y que por diferencias de la interna le hicieron eso”, dijo.
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