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Especialistas analizan la falta de billetes

Advierten que es mayor el costo político sobre la percepción por falta de billetes que emitir moneda de mayor denominación.

La directora del Estudio Bein & asociados, Marina dal Poggetto, opinó hoy que el Gobierno debería evaluar “qué tiene mayor costo político, si la percepción de que faltan billetes o crear un billete de mayor denominación”. Esto implicaría, sin embargo, reconocer una inflación superior a la registrada por el INDEC.

También señaló que el faltante de billetes no es un problema de falta de liquidez sino de la decisión de mantener el de mayor denominación en 100 pesos, cuando la inflación fue del 400 por ciento desde la salida de la convertibilidad.

En tanto, Del Poggetto precisó que el faltante se percibe en el sistema interbancario desde hace tres o cuatro meses, mucho antes de que lo sintieran los usuarios. “No es falta de liquidez del sistema financiero”, aseveró la especialista en cuanto a las razones que explican la escasez de billetes en el sistema bancario, y también aclaró que tampoco se trata de que “no se llegó a imprimir lo que hacía falta”.

Otro de los detonantes de esta situación que la especialista identificó, fue la “demanda muy alta” que se registra habitualmente a fin de año, con el cobro del aguinaldo y el inicio de las vacaciones, se sumó que “es mas alta porque la gente percibe que va a faltar billetes”, lo mismo que sucede con las “expectativas inflacionarias”.

Al respecto, sostuvo que el Gobierno “va a haber que sincerar” el alza inflacionaria y evaluar “qué tiene mayor costo político, si la percepción de que faltan billetes o crear un billete de mayor denominación”. “Hace 3 o 4 meses que se empezó a ver la falta de billetes, pero en el sistema interbancario, en donde algunos bancos tenían problemas”, continuó la economista en diálogo con Radio El Mundo.

En cuanto a la inflación prevista para 2011, Dal Poggeto estimó que “puede ser muy parecida a la de 2010”, pero que va a depender de los acuerdos salariales. El alza de la canasta básica y de servicios “va a estar en torno al 23 a 24 por ciento”, pero “va a depender qué pase con los acuerdos salariales”, dado que “podría ubicarse incluso por debajo”, debido a que “no solo con políticas monetarias se puede contener la inflación”, señaló.

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