Paola Cándido
Verónica Barberis trabajó toda la vida como empleada doméstica y sentía que no servía para otra cosa. Este año empezó un curso de maquillaje profesional para ver si podía pagar las cuentas de otra forma. No fue fácil. Le costaba relacionarse con las compañeras del curso y le daba vergüenza cómo lucían sus manos. A la tercera clase le pidieron que sea modelo y le preguntaron qué le gustaba de ella. No supo qué responder y cuando volvió a su casa fue su hija quien la ayudó a no dejar el curso. “Mamá, vos me decís que las cosas no se dejan cuando se ponen difíciles. Hay que afrontarlas”, le dijo. Hoy ella es una de las 13 mujeres de Cabín 9, uno de los barrios más humildes entre Rosario y Pérez, que encontró un oficio y otra forma de empoderarse. “Me aferré a esa oportunidad y entregue todo. Empecé a darme valor, a elegir y hoy veo lo que quiero ser”, cuenta a El Ciudadano.
De fundación
La capacitación en maquillaje llegó a Rosario de la mano de la Fundación de los Colores que trabaja con mujeres en situación de vulnerabilidad. La ONG nació en Buenos Aires en 2015, capacitó a más de 100 mujeres y dicta cursos en más de 20 localidades esa provincia. Nathalie Stevens es la creadora de la iniciativa y trabajó durante más de 20 años en empresas multinacionales de cosméticos. “Empezamos en la Fundación Cuatro Vientos con 50 alumnas y quedaron 13. Queremos llegar a otras ciudades del país. En el segundo semestre de 2019 vamos a hacer más capacitaciones en Rosario”, contó Stevens a El Ciudadano. “Si se da un curso de calidad donde se demuestra cuáles son las oportunidades le abrís la cabeza a una persona. Es importante que la mujer se empodere y tenga conciencia de todo su potencial”, aseguró Stevens.
Método
El curso dura tres meses y se dicta una vez por semana durante dos horas y media. Tiene aval académico de la Universidad de Flores. Enseñan competencias técnicas, comerciales y sociales. También a generar ingresos con el oficio de maquilladora profesional. Les entregan un set completo de maquillaje de la marca profesional Andrea Pellegrino, un uniforme diseñado por Martín Churba y el pin de pertenencia a la Fundación de los Colores. Todo gracias a un crédito de 12 cuotas sin interés que gestionó la Agencia de Desarrollo Región Rosario. Con ese dinero para adelante se capacitará a más mujeres en el futuro. “Buscamos el auto empleo y lo más importante es que aprendan a ganar dinero con el oficio”, explicó Stevens.
Más
“Las personas muchas veces no salen del barrio y sólo conocen eso. Este curso es de superación, esfuerzo, valentía, respeto, voluntad, trabajo y valores”, agregó la representante de la ONG.
Semanas atrás la fundación recibió una distinción del Concejo Municipal en reconocimiento a su compromiso en el empoderamiento de las mujeres en la inserción laboral. La propuesta fue presentada por el concejal del Frente Progresista Cívico y Social (FPCyS), Lisandro Zeno y contó con el apoyo por unanimidad del resto de los legisladores.
Comentarios