Investigadoras e investigadores del Conicet y de la Universidad Nacional del Litoral comunicaron la primera detección de ARN viral del sars-cov-2, causante del covid, en aguas residuales urbanas. Fue en la ciudad de San Justo, y como corolario de los trabajos sobre muestras recolectadas desde junio último. El 77% de las muestras positivas se dio en aguas residuales urbanas sin tratar. Las que pasaron por la etapa final del proceso de tratamiento no presentaban rastros del virus.
El trabajo fue realizado en el marco del Proyecto de Investigación Científica y Tecnológica “Tratamiento de efluentes urbanos: remediación y bioprospección de microalgas de interés biotecnológico”.
La investigación consiste en monitoreos fisicoquímicos y biológicos periódicos en las aguas residuales urbanas (Arus) generadas en San Justo, que son tratadas por la Cooperativa de Servicios Públicos, Sociales, de Asistencia Social y Vivienda local. La planta cuenta con un sistema de lagunas de estabilización: dos lagunas anaeróbicas (tratmiento con bacterias sin oxígeno), dos lagunas facultativas primarias, dos secundarias (LFS) y, finalmente, una cámara de cloración.
El trabajo tuvo como objetivo determinar la presencia de ARN del virus considerando la detección de genoma viral en diferentes etapas del tratamiento. Los muestreos se iniciaron en junio de 2021. Se fueron recolectando muestras de aguas residuales crudas, tratadas en las lagunas secundarias y en la etapa de post-cloración.
Para la innvestigación, se utilizaron marcadores genéticos específicos para detectar el gen “N” (nucleocapside) y el gen “ORF1ab” (PerkinElmerTM) del virus. Lo que se observó fue una disminución significativa de sars-cov-2 a medida que avanzaba el tratamiento de los efluentes. El virus fue detectado en el 30% de las muestras analizadas. Del total de las que dieron positivas, el 77% se registró en las aguas sin tratar (efluentes crudos), el 23% en las tratadas en las lagunas secundarias, y no se encontraron rastros en las aguas recolectadas en la etapa final del proceso, el de post-cloración, que es previo a su vuelco en el río Salado.
Los investigadores resaltaron como conclusión la relevancia de una vigilancia ambiental del virus en aguas residuales urbanas y la necesidad de implementar sistemas de tratamientos eficientes en las localidades donde no existan, a escala regional y global.
En Santa Fe, así como en otras provincias, hay una escasez de conocimientos al respecto, por lo que es necesario aportar información para la implementación de medidas sanitarias.
La presencuia del virus en aguas residuales requiere una segunda etapa de ivestigación, que apunte a determinar la co-circulación de distintas variantes genómicas del sars-cov-2 y la duración de la presencia viral aún cuando no se detecten casos clínicos nuevos.
El trabajo fue dirigido por la investigadora del Conicet Luciana Regaldo. El equipo incluyó a Wanda Polla, Ulises Reno, Silvina Vanesa Kergaravat, las becarias Natalí Romero, Josefina Schmuck y Lucía Giménez y la doctora Ana María Gagneten, responsable del Laboratorio de Ecotoxicología de Facultad de Humanidades y Ciencias de la UNL. Con ellos colaboraron estudiantes de grado e investigadores de otras universidades del país y del exterior.
Los investigadores destacaron el aporte del gobierno de San Justo, la Cooperativa local y el Hospital Juan Lanza.
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