El Ciudadano
Clara García se muestra confiada. La candidata al Senado de la Nación cree que el Frente Amplio Progresista tiene mucho margen para crecer en las elecciones legislativas de este domingo luego de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias. La ex funcionaria municipal le pega duro al Frente de Todos y Juntos por el Cambio. Dice que Marcelo Lewandowski y Carolina Losada se negaron a debatir y eso le impidió a la gente “escuchar propuesta”. También destacó la figura de Pablo Javkin y la pertenencia de ambos al FAP.
– ¿Con qué expectativa cierra la campaña para este domingo?
– Estamos seguros que el Frente Amplio Progresista va a ser la fuerza que más va a crecer entre las Paso y las generales. Es algo que lo percibimos en toda la provincia y en el devenir de los diferentes sectores. Después, decir también con orgullo que nosotros tuvimos unas Paso donde los 19 departamentos de la provincia nos dieron la victoria, incluso con más del doble de los votos de nuestro contrincante circunstancial. Aunque ese mismo lunes ya nos pusimos a trabajar juntos de cara a la campaña. Estamos bien. Pero vemos como nuestro país está en un momento institucional complejo por las propias diferencias internas de la coalición de gobierno. Y también por la realidad económica.
– ¿Qué margen de maniobra o de imponer una agenda propia tendrá el Frente Progresista en un Congreso y un país tan polarizado entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio?
– A diferencia de esos dos polos que han tenido la misma característica, que es levantar la mano por obediencia partidaria para quedar acordes con una fuerza política manejada desde Buenos Aires, nuestras postura va a ser levantar la mano en favor de Santa Fe. Yo soy muy crítica respecto de temas que impactan en la vida cotidiana de la gente y que se deciden en un despacho porteño. A la gente le cuesta advertirlo. Pero cuando un colectivo, por ejemplo, tiene un costo mayor al de Capital Federal, tiene que ver con que en el Presupuesto se aprobó un subsidio al gasoil (que pagamos todos) mucho mayor en capital. A nosotros no nos van a encontrar abrazando a Cristina en el Instituto Patria, como Lewandowski. Ni endeudando al país como la otra opción. Nos van encontrar defendiendo a Santa Fe.
– ¿Coincide con la idea de que al no haber una mayoría absoluta el voto de las pequeñas minorías a va a ser importante en el Congreso?
– Sí, claro. A mí me gusta pensar la política desde algo que, en los últimos años y con la grieta, fue teniendo mala prensa. Y tiene que ver con poder encontrar acuerdos políticos. En todo el mundo los países intentan encontrar acuerdos para soluciones definitivas. Para esos procesos transformadores que necesitan sostenerse en el tiempo. A nosotros nos van a encontrar con diálogo, pero en un diálogo que siempre sea en favor de Santa Fe.
– ¿Y proyectos de agenda propia, cuáles planea llevar al Senado?
– Nuestra Nación tiene una deuda desde hace 25 años, que es la de repensar la coparticipación de impuestos. Todos los impuestos que nosotros pagamos, desde el IVA que está en la leche, hasta el impuesto a la Ganancias y las retenciones, van a la Nación. La manera como después vuelve se da, cada vez más, de manera discrecional. Hoy Santa Fe es muy perjudicada ante otras que tienen un lobby o una relación muy fuerte con Nación, y que logran inversiones, rutas nacionales y viviendas. Eso hay que modificarlo.
– ¿Qué valoración hace del gobierno de Alberto Fernández?
– Yo creo que pasamos de que ganara Macri con un voto bronca a que ganara Alberto. Y hoy, te diría, esto se transformó en un voto decepción. Definitivamente, todos los parámetros han ido muy mal. Y uno advierte el doble comando. Cuando hay decisiones, o es Cristina y su gente o es Alberto y su gente. Y en el medio de esa interna feroz, que ya no es la de un espacio político sino la del gobierno -exactamente igual que la de (Omar) Perotti en Santa Fe-, no hay una unidad de criterio. Pagamos la deuda al Fondo, sí o no? Depende de los ministros con los cuales hables. Esta dificultad de encontrar un rumbo al país hace que el primer escollo del gobierno esté puertas adentro. Yo te diría que la oposición quedó en un segundo lugar. Y en ese marco, como oposición, somos los más preparados. Yo soy muy crítica de una candidata que en su foto pone una cuestión irónica con respecto a Cristina y a dejarla atrás. La manera dejar atrás la corrupción, la falta de diálogo, la falta de gestión pública potente es animándose a dar debates con argumentos, a presentar proyectos. Y aquí no los hemos podido escuchar de parte de Losada ni de Lewandowski, porque se negaron al debate.
– ¿Los dos se negaron?
– Y, no pudo hacerse. Sólo tuvimos un debate en la universidad donde Losada no fue y Lewandowski escondió su pertenencia kirchnerista. Mientras los socialistas sentimos orgullo de quienes nos precedieron y declaramos haber aprendido de ellos. Lewandowski y Cavatorta, en Rosario, niegan su pertenencia kirchnerista, que la tienen. Y después, hubo ofrecimientos de debates en canales locales e incluso en canales de Buenos Aires, a los cuales no se animaron a debatir los dos. Eso le impidió a la gente escuchar propuestas y comparar, ver si alguien puede argumentar su postura o no.
– Tanto la campaña de Losada como la Lewandowski…
– Son la no campaña. En el caso de Lewandowski, él y Mirabella tuvieron esa foto en el Instituto Patria de la cual ahora parecen no querer hacerse cargo. Estoy convencida que ese modelo no lo quiero para que llegue a Rosario. Hay que apoyar al intendente de la ciudad, a quien la Nación y la provincia lo dejan solo. Hay un kirchnerismo que ve en Rosario una posibilidad de oposición seria, con saber hacer, con cercanía a la gente. Con un diálogo político que genera creación y lazos sociales. Y siempre han apuntado contra la ciudad de Rosario. Creo que el kirchnerismo viene por nosotros. Por eso yo quiero apoyar fuerte a Pablo Javkin y la ciudad de Rosario desde el Senado en cuestiones que van a hacer de su futuro y desarrollo.
– ¿Cree que en esta campaña el Frente Progresista ha logrado instalar que usted representará a Rosario y al propio intendente en el Congreso y que, al mismo tiempo, su candidato en la ciudad es Ciro Seisas bajo la gestión de Pablo Javkin?
– Sin duda. Pasada la interna hemos estado siempre juntos. Se ve en los carteles y las propagandas. Y hasta en nuestra actividad cotidiana. Vengo de estar con Pablo hace un ratito en distintas actividades. La verdad es que yo me sentí respaldada hace un par de semanas en Santa Fe: cuando hicimos el lanzamiento de campaña, Pablo tuvo una presencia con un discurso que realmente me emocionó por su apoyo.
– ¿Y cómo evalúa su gestión?
– Es una gestión de un intendente que da la cara de manera constante. O sea, uno siente que es una persona como cualquier ciudadano, pero con muchísimas responsabilidades y una mirada muy cercana. Sin duda, la pandemia ha interrumpido muchas acciones de los gobiernos. Pero aún en esa situación Rosario siguió siendo diferente en la salud pública y la cultura. Es una ciudad que, con sus dificultades, sigue muy activa. Yo siento un gran orgullo de la ciudad y del intendente.
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