Tres muertos, dos desaparecidos y unas 2.250 familias afectadas es el saldo parcial de torrenciales lluvias e inundaciones registradas en Bolivia, informó este sábado el director de Emergencias y Auxilio del Ministerio de Defensa, general Rafael Uría.
Los fuertes aguaceros se han registrado en las últimas semanas principalmente en las regiones de Cochabamba, Tarija (sur), Potosí y La Paz (oeste) y los servicios meteorológicos temen que el problema aumente hacia las tierras bajas, donde confluyen los ríos bolivianos: los departamentos amazónicos de Pando y Beni y los llanos de Santa Cruz.
“Hasta el último reporte que hemos recibido el viernes tenemos 2.200 familias afectadas en el Chapare y otras 25 familias en Tarija”, pero es probable que los datos cambien si se registran más aguaceros, acotó el jefe militar.
El director de Emergencias agregó que en el Chapare, una zona cocalera de Bolivia y la más castigada por los crudos temporales, “se está movilizando ayuda humanitaria; hablamos de víveres y otros insumos”.
El estatal Servicio Nacional de Meteorología pronosticó que las lluvias aumentarán en enero y febrero por efecto del fenómeno climático de El Niño.
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